El atractivo turístico de las algas
Aprovechan su valor gastronómico para dar a conocer el proceso completo desde su recogida hasta la elaboración de platos Varias empresas isleñas aprovechan las propiedades de esta planta marina para atraer visitantes
Actualizado: GuardarLa crisis agudiza y el ingenio y ya se sabe que el mejor trabajo es el que uno se inventa. En los tiempos que corren la innovación se ha convertido en un valor primordial para sobrevivir y eso lo saben bien varias empresas isleñas que han decidido poner en marcha una iniciativa turística alrededor de las algas. En este caso, se trata de dar a conocer todo el procedimiento de recogida, elaboración y preparación de este alimento que cada día es más utilizado en la lata cocina. La idea ha surgido de la empresa Compuerta que ha aprovechado la inercia de Suralgae, pionera en la selección y exportación de las algas como producto gastronómico.
La idea es asentar la ruta después del verano, aunque ya han comenzado varias experiencias para valorar el acierto de las actividades propuestas y la posibilidad de incluir alguna más. Además, se aprovechan los recursos del parque natural que es más conocido por sus limitaciones urbanísticas para San Fernando que por sus posibilidades económicas.
En la primera parte de la visita el estero es el protagonista ya que allí se recogen y se explican las diferentes propiedades de las algas más aprovechadas para la comida. Es el caso de la conocida como la lechuga de mar, la ogonori, la aogori y el espárrago de mar. Una vez recolectadas es el turno de acudir a las instalaciones de Suralgae donde se explican los procesos de salazón, la deshidratación y el envasado. Esta empresa, que sacan adelante tres mujeres está abriéndose al mercado con éxito gracias a la calidad de las algas que recolectan, así como su ingenio a la hora de crear productos como las especias de algas. Además, su trabajo artesanal y de conservación le han abierto las puertas para conseguir los permisos necesarios para trabajar en medio del parque natural o en mar abierto.
El restaurante Casa Miguel es el encargado de ofrecer la cata de las delicias culinarias preparadas con estos alimentos. En principio el menú está compuesto por platos tan suculentos como las tortillas de bacalao con ogonori y aonori verde o la paella de mariscos con aderezo de algas.
Todo acaba con un tratamiento de algoterapia de forma que se combina otro de los mercados en auge basado en el turismo de salud. Una arriesgada apuesta y sobre todo original que cumple los requisitos que se exigen para que San Fernando logre virar su modelo de ciudad hacia el turismo. Y es que debe hacerlo compitiendo con localidades que ya copan el mercado de Sol y playa como el caso de Cádiz, Chiclana o El Puerto, motivo por el que debe abrirse a nuevas experiencias que atraigan a los visitantes.
«La intención es conseguir que se dé a conocer este producto que cada es más utilizado en las cocinas, pero ir un poco más allá y hacer una cata sensitiva basada en los olores, texturas y los colores de las algas. Por el momento vamos a probar cómo van y nuestra intención es conseguir que se asiente la ruta tras el verano», señaló Sebastián Gómez, uno de los encargado de la empresa Compuertas, experta en organizar visitas alrededor de las peculiaridades de la provincia.