Una decena de alcaldes de la provincia llega al cargo con las arcas municipales vacías
Iniciarán su mandato con las arcas municipales vacías y un nivel de gasto por encima del 100% de los ingresos
Cádiz Actualizado: GuardarLa victoria tiene a veces un sabor agridulce y es el que ya paladean los triunfadores de estas elecciones tras echarle un vistazo a las cuentas municipales. Pasada la euforia del momento, es hora de ponerse a trabajar y replantearse el nuevo escenario. Los que siguen en el sillón consistorial ya lo conocen de sobra, pero los que llegan tendrán que comenzar a gobernar desde la austeridad más absoluta. Aquello de «vamos a ahorrar hasta en goma de borrar» que tanto repitieron los regidores cuando comenzó a arreciar la crisis se va a quedar corto para lo que viene ahora.
Un total de nueve alcaldes entrantes asumen el bastón de mando con las arcas totalmente secas. Y no solo eso, su nivel de gastos supera al de ingresos, según la liquidación del presupuesto de 2009, recientemente actualizada por el Ministerio de Economía y Hacienda. Es el caso de Los Barrios y Chipiona si no se formaliza el pacto entre PSOEe IUque mantendría en la Alcaldía al socialista Manuel García. Este último arrastra el mayor descuadre en la provincia con un nivel de gasto que supone el 132% de los ingresos, lo que se traduce en un déficit de más de ocho millones de euros.
Ernesto Marín (PP), ganador de las elecciones en Chiclana, también se encuentra con un enorme agujero. Además de los casi tres millones de descuadre, el consistorio arrastra una deuda con los bancos de 47. Ypasará por lo mismo la popular María José García- Pelayo en Jerez, donde el nivel de gastos fue del 108% con respecto a los ingresos y lidia con una deuda de 82,7 millones con las entidades bancarias.
Complicado lo tiene en su estreno como alcalde Manuel Fernando García (IU) en Medina. Sus arcas municipales ya tenían un déficit de más de 800.000 euros y debe en torno a 1,4 millones, con lo que tiene una la liquidez ajustada para este próximo mandato que comienza.
Maribel Peinado (PA) en Puerto Real tendrá que gobernar con un gasto que representa el 105% de los ingresos, como el candidato electo en Vejer, el popular José Ortiz. Ambos municipios cambian de manos con un importante déficit que se ha mantenido en 2010, sin embargo, en los dos se han puesto en marcha planes de estabilidad que tendrán que endurecerse si los nuevos regidores quieren volver a la senda de las cuentas saneadas.
Ese camino seguirá también el andalucista Juan Luis Morales, con el 106% en Villamartín. Mal empezará el popular Juan Andrés Gil en Tarifa, donde le ha arrebatado la Alcaldía al PSOE. Los gastos de la corporación fueron un 122% de los ingresos y dejan un agujero en el año fiscal de cuatro millones de euros difíciles de recuperar cuando aún está pendiente el pago a los bancos de casi tres millones.
Cuentas saneadas
Dada la situación y los planes de ahorro emprendidos en todas las corporaciones, cabe la posibilidad de que tal vez la deuda haya empezado a adelgazar, pero resulta complicado reducir costes cuando buena parte del presupuesto se va en pagar las nóminas, que más allá del 5% de recorte que aprobó el Gobierno la primavera pasada, no hay por donde meter la tijera.
Los primeros años de crisis han dejado muy tocadas a las corporaciones a juzgar por las cuentas. Muy pocas lograron cerrar con superávit en 2009, solo las más pequeñas como Zahara, Benalup o Alcalá del Valle esquivaron los números rojos. Llama la atención el caso de municipios como San Fernando, Algeciras o San Roque, que cerraron ese ejercicio en positivo a pesar de la tremenda contracción de la economía. Precisamente en estos tres últimos se producirá un cambio de gobierno con nuevos regidores populares que le han arrebatado la Alcaldía a socialista y andalucistas.
En números rojos
Por el contrario, los otros dos grandes ayuntamientos de la provincia, Cádiz y Jerez, afrontan una dura situación. Ya en 2009 la capital cerró con un descuadre de 22 millones de euros que también ha ido arrastrando a lo largo del año pasado. La merma de la financiación procedente del Gobierno central y el importante crédito que la alcaldesa Teófila Martínez pidió para construir la tribuna del Estado han dado al traste con la trayectoria de superávit. Hace solo dos años el Ayuntamiento gaditano gastaba 188 millones, frente a los casi 165 que ingresaba. En este caso, será el mismo equipo de Gobierno el encargado de gestionar este déficit e intentar cerrar en positivo.
En esa misma línea ha seguido el consistorio jerezano, gobernado hasta ahora por la socialista Pilar Sánchez. Su proporción de gasto supone el 108% de los ingresos y se ha visto agravada a lo largo de este año. Las deudas ahogan a una corporación que cuenta con casi 3.000 trabajadores en plantilla y una nómina de 97 millones de euros.
YEl Puerto, que cerró el presupuesto de 2009 con un descuadre de 10 millones de euros. Los gastos han rebasado el límite y será Enrique Moresco (PP) el que tenga que invertir la situación repitiendo con los andalucistas como socios de gobierno.
Uno de los motivos de estos descuadres económicos ha sido la caída de la construcción. Los ayuntamientos han visto reducirse las licencias de obra, una de sus fuentes de ingreso, además de las dificultades en la recaudación municipal por el cobro de impuestos y recibos. El recorte de la financiación del Estado y la autonómica se ha dejado sentir y ha repercutido en las corporaciones que viven más que nunca con el agua al cuello. Y así surgen casos como el de la Línea, Jerez o Barbate, donde se han producido problemas con el corte de suministros y retrasos en el pago de las nóminas.