Condenados los etarras de la T-4 por otro ataque
El Tribunal Supremo impone cuatro años de cárcel a Portu y Sarasola por intentar volar un centro financiero y comercial en Madrid
MADRID. Actualizado: GuardarEl Tribunal Supremo considera que hay pruebas para asegurar que ETA no slo planeó, sino que intentó atentar contra el complejo Azca, el corazón financiero y comercial de Madrid, antes de las elecciones generales de 2008. La Sala de lo Penal del tribunal condenó a Igor Portu y Mattin Sarasola, los terroristas que volaron el aparcamiento de la T-4 de Barajas en 2006, a cuatro años de cárcel por aquel ataque frustrado y atendió así el recurso de la Fiscalía, que argumentó que la intención de atentar contra el complejo de rascacielos no era un «futurible».
El pasado junio, la Audiencia Nacional condenó a Portu, Sarasola y a un tercer miembro del 'comando Elurra', Mikel Sebastián, a penas de entre 16 y 17 años de cárcel por pertenencia a banda armada y tenencia de armas y explosivos. Pero el tribunal les absolvió de conspiración para cometer un delito de estragos en Azca. La sentencia insistió en que solo se hicieron «labores de información» sobre ese ataque, pero que los terroristas ni habían tomado la «decisión» de llevarlo a cabo ni habían recibido órdenes para ejecutarlo.
El Ministerio Público no estuvo de acuerdo con la sentencia porque los cuatro terroristas llegaron incluso a viajar juntos el 1 de diciembre de 2007 a Madrid para preparar el atentado y comprobar las vías de huida, por lo que considera que el atentado estaba maduro, al punto que solo faltaba la orden de la «jefatura de la banda armada».
El Supremo dio la razón a la Fiscalía ya que «existen unos actos que superan la mera ideación, el mero pensamiento en realizar un delito» como son el viaje a Madrid. La sala recordó asimismo que «los acusados verificaron datos y comprobaron localizaciones posibles», lo que prueba la «voluntad de actuar». «El delito -insistió el fallo- estaba concretado y también el lugar de realización (Azca) y el dispositivo de ejecución decidido (coche bomba)».