Disuelven una protesta contra una cárcel oculta

No pudieron ni acercarse. Unos 300 activistas de derechos humanos, salafistas y miembros del movimiento 20 de Febrero fueron dispersados ayer a porrazos cuando intentaban iniciar una marcha hacia el presunto centro de detención de Temara, a las afueras de Rabat, donde los opositores aseguran que se cometen torturas y detenciones ilegales, y que Marruecos no reconoce abiertamente.