HOSPITAL
Actualizado: GuardarImpresionante. No hay otra palabra para definir la trayectoria de 'Hospital central', que esta semana cerraba su décimo novena temporada y ya está preparando su vigésima edición. No hay ninguna serie semanal española -ni extranjera- que haya durado tanto. Cuando volvió a antena, este curso, lo hizo entre anuncios de desguace y con la convicción generalizada de que este era su canto del cisne. Pero la historia de Vilches y compañía ha mantenido a lo largo de estos últimos meses una audiencia media de en torno a 2,3 millones de espectadores, con una cuota de pantalla del 13,6% y permitiéndose liderar su franja de emisión. Este éxito ha pillado a todo el mundo por sorpresa, incluidos los propios capitostes de Telecinco, que viene cobijando a esta serie desde el ya lejanísimo año 2000. De hecho, todo estaba preparado para que el episodio de esta semana fuera el último, con el retorno de viejos personajes y un final a la altura de su trayectoria. Pero no: la serie continuará. Vilches resiste. El Hospital no se cierra. ¿Por qué? Las malas lenguas dicen que la causa reside en el pobre rendimiento de los otros estrenos españoles de Telecinco ('Ángel o demonio', por ejemplo): frente a esos pobres datos, 'Hospital central' tiene la ventaja de haber mantenido la fidelidad de un amplio número de espectadores. Es verdad que su cuota media de esta temporada es la más baja de la serie en toda su larga historia, pero igualmente cierto es que ahora los puntos de 'share' se venden más caros que nunca. Sostenerse por encima del 10% ya es una proeza y, en ese contexto, la capacidad de 'Hospital central' para 'fidelizar' a su clientela es un auténtico tesoro.
Así las cosas, la continuidad de 'Hospital central' es una garantía de seguridad para la cadena. Ahora es el momento de subrayar el mérito de los actores, particularmente de aquellos que, como Jordi Rebellón, han identificado completamente su imagen con el producto, pero también hay que elogiar a los guionistas, capaces de prolongar la narración durante tanto tiempo. Han hecho un gran trabajo.