LLEGÓ LA CAMPAÑA

Lo que nos temíamos, comenzó la campaña y se desenterraron las hachas, que nunca estuvieron enterradas.

A través de las encuestas que, día a día, ofrecen todos los medios de comunicación ya sabemos, o al menos esos creemos, quién, cómo y cuándo van a resultar vencedores. ¿Ustedes se lo creen?

Se nota claramente a quien hacen campaña muchos medios de comunicación (solo hay que contabilizar las páginas o las portadas que dedican a sus candidaturas preferidas) Pero, lo malo de todo esto es que durantes estos pocos días, afortunadamente, que va a durar la campaña, vamos a ver cómo todos nuestros problemas tienen solución. Si Francisco Menacho decía que no había un duro para concluir la obra del castillo de San Sebastian, en veinticuatro horas, nuestro ínclito ministro y diputado por Cádiz (sí por Cádiz) se saca de la chistera un conejo blanco cargado de millones de euros y. «tatachan» el castillo se termina para el doce. Solo hay que repasar estos días los titulares de nuestros periódicos y observaremos una vez más como somos unos auténticos zoquetes al no confiar en nuestros dirigentes porque ellos, y solo ellos, en un «plis plas» han encontrado la solución a todos nuestros problemas.

Ya tenemos solución para el grave problema del paro, también el carril bici va a ser prioritario para todos, el hotel de lujo de Valcarcel va a construirse sí o sí, el tranvía (que sabe Dios quien lo verá) llegará hasta la Plaza España, vamos a tener por fin un gran balcón al mar gracias a la reordenación de Canalejas, Procasa va a construir viviendas gratis para todo el que no tenga y así unos y otros, en el piojito, no paran de prometernos cosas.

Lo malo de todo esto es que el próximo domingo 22 de mayo votaremos y más tarde cada uno pactará con quien le interese, si le hace falta, y de lo que dije entonces cuando buscaba el voto «tururú», hasta que haya elecciones dentro de otros cuatro años y, a vivir de la renta.