Trípoli arma a los civiles para luchar contra la OTAN
Los leales al régimen advierten de que si los aliados llegan a Misrata desencadenarán «un infierno» sobre la Alianza Atlántica
Actualizado: GuardarMuamar Gadafi continúa con su ofensiva. El Gobierno de líder libio no está dispuesto a ceder ante las presiones de la comunidad internacional y ya ha comenzado a entregar armas a la población civil para que puedan hacer frente a una hipotética «invasión» de la Alianza Atlántica, según confirmó ayer el portavoz del régimen, Musa Ibrahim. «Muchas ciudades se han organizado con escuadrones para combatir cualquier invasión de la OTAN», explicó Ibrahim tras advertir a los rebeldes y a quienes los apoyan que «toda la población» cuenta ahora con rifles y armas ligeras.
«Si los aliados llegan a Misrata o a cualquier otra ciudad libia, desencadenaremos un infierno sobre la OTAN», espetó el portavoz del régimen de Gadafi en tono amenazante. Pero la advertencia de los leales al régimen fue más allá. Ibrahim avisó a las tropas aliadas de que se encontrarán con «una bola de fuego» y de que la situación será «diez veces peor que en Irak».
Con la población civil atemorizada por los continuos enfrentamientos entre los leales a Gadafi y los milicianos -el Consejo Nacional de los alzados sitúa la cifra de muertos de esta guerra en 10.000 personas-, Ibrahim precisó ayer que no se ha procedido a la entrega de armas para que los ciudadanos «luchen contra los rebeldes», sino contra la OTAN. «Si piensan llegar sobre el terreno para ocupar cualquier ciudad libia, las tropas aliadas tendrían ante así no al Ejército libio, sino a tribus a hombres y mujeres jóvenes», desafió.
Los combates entre los sublevados y las tropas del Gobierno de Gadafi se han intensificado en los últimos días en la ciudad de Misrata, el principal enclave rebelde en el oeste del país y del que, según Ibrahim, el régimen ya controla el 80%, afirmación que los rebeldes desmienten al asegurar que los leales a Muamar Gadafi «únicamente controlan el puerto y las áreas cercanas».
La situación en Misrata ha llegado a tal punto que ayer tuvieron que evacuar a Bengasi a un millar de inmigrantes en un barco fletado por la Organización Mundial de las Migraciones (OIM). La embarcación también traslada los cuerpos de los dos fotoperiodistas -Tim Hetherington y Chris Hondros- fallecidos el miércoles tras ser alcanzados por un obús lanzado por las fuerzas de Gadafi mientras cubrían el conflicto.
Ante la sangría de cadáveres registrada en Misrata en los últimos días, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, acusó ayer a las fuerzas del líder libio de estar llevando a cabo «ataques despiadados» contra la población civil en lo que podrían haber usado bombas de racimo.