El presidente pide a Aznar que «hable bien de España»
DURANGO. Actualizado: GuardarJosé Luis Rodríguez Zapatero no evitó entrar en la polémica generada por la conferencia de José María Aznar en la Universidad de Columbia en la que calificó a Gadafi de «un amigo extravagante», criticó a los países occidentales y puso en duda que España pueda afrontar el pago de su deuda. El presidente del Gobierno dejó claro que le da «igual» quién sea el «amigo» del expresidente, pero si reclamó a Aznar «respeto» por las decisiones «soberanas» del Parlamento, que aprobó con el 98% de los votos la intervención española en Libia.
Más dolido que por los comentarios sobre Gadafi se mostró por las declaraciones del exjefe del Ejecutivo sobre la supuesta falta de solvencia de la economía española. Zapatero le exigió que, al menos en el extranjero, procure «hablar bien de España» y recordó que en su reciente intervención académica llegó a decir «cosas graves» como que el Estado del Bienestar no es sostenible.
Ya sin citar a Aznar expresamente aunque en velada referencia a él, el secretario general del PSOE, en el mitin de Durango, se quejó de la «poca ayuda» que tienen el Gobierno por parte de esos que se autocalifican de «patriotas», a los que exigió que «aquí y fuera de aquí» defiendan que España «va a salir adelante» y que den cuenta de la «fortaleza y solvencia» de su economía.
El presidente del Gobierno recordó a su antecesor en la Moncloa que en el momento actual hay «muchas cosas importantes» para España y su imagen económica internacional. En esa línea, aseguró que él «siempre lucha por defender el interés de España» y no como hacen otros, que «contribuyen desde fuera a perjudicar la imagen de España».