El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante el mitin de Albacete. :: EFE
ESPAÑA

Zapatero censura al PP por utilizar el terrorismo cuando «más derrotamos a ETA»

El presidente del Gobierno exige a Rajoy y Aznar que no pongan «zancadillas» a la solvencia de España en el exterior

ALBACETE. Actualizado: Guardar
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José Luis Rodríguez Zapatero, con su decisión de no volver a ser candidato a la Presidencia del Gobierno en 2012, ha logrado recuperar el afecto de las bases socialistas, de las que se había distanciado, según los sondeos de intención de voto. Al menos esta es la impresión que dejan los tres mítines que ha protagonizado desde el comité federal del pasado día 2. En el de ayer en Albacete, unos 3.000 militantes le aclamaron al grito de «¡presidente, presidente!».

Zapatero mostró en su intervención que va a ser mucho más que un convidado de piedra durante el año que resta de legislatura. Es más, el secretario general del PSOE dejó ver que pasa al ataque. «La oposición -indicó- me ha dado bastante leña en los tres últimos años y la verdad es que no me he dedicado mucho a defenderme, porque tenía que defender a España, que estaba en una situación bastante difícil».

Y la verdad es que se empleó con rotundidad en la primera crítica que le dedicó al PP en Albacete. Confesó que no se podía «ni callar ni aceptar» por más tiempo que la formación que dirige Mariano Rajoy «utilice el terrorismo para criticar al Gobierno, cuando más estamos derrotando a ETA». Una clara alusión a los declaraciones de varios dirigentes populares, en especial María Dolores de Cospedal, en las que responsabilizaban al Ejecutivo socialista de las últimas liberaciones de presos etarras, a causa de un cambio de criterio de la Audiencia Nacional en relación con la denominada 'doctrina Parot'.

«Sentido de Estado»

El presidente del Gobierno, que durante el viaje que realizó esta semana a China había eludido abordar esta cuestión, se mostró especialmente irritado con «la falta de sentido de Estado» del PP. Enfatizó que cuando el PSOE estuvo en la oposición «siempre» apoyó a José María Aznar en la política antiterrorista. «Pasara lo que pasara», sentenció. Para Zapatero, el PP debería pensar en el interés de todos los ciudadanos que, a su juicio, no es otro que «ver el fin de la violencia».

Además del por el terrorismo, el líder socialista censuró la «falta de compromiso» del PP con España por poner en duda la fortaleza de la economía del país. «Sabéis la decisión que he tomado, pues que me pongan a mí todas las zancadillas, pero no a España, no a nuestra solvencia económica ni a nuestra fortaleza», sentenció.

En esta ocasión sí puso nombres y apellidos. A José María Aznar le reprochó con dureza que hubiera afirmado que «España no podrá o le costará mucho trabajo pagar sus deudas», mientras que a Mariano Rajoy le afeó que pusieran en duda la eficacia de su periplo por tierras chinas en el que empresas españolas han firmado contratos por más de «mil millones de euros» y con el que se ha logrado comprometer inversión del Gobierno chino -aunque no especificó su cuantía-. Por todo ello, exigió tanto a Rajoy como a Aznar que «tengan contención y sentido de la responsabilidad» en los asuntos de Estado.

El secretario general del PSOE también habló de las próximas elecciones municipales y autonómicas. «Cree el Partido Popular que nos van a barrer, pero nosotros somos como los juncos», remachó. Aseveró, asimismo, que lo que está en juego el 22 de mayo es «el Estado del Bienestar, una educación igual para todos y la sanidad gratuita».

Zapatero pidió a los suyos que no olviden que «todas los derechos sociales conquistados en España tienen la firma del PSOE», sobre todo a la hora de explicar a los ciudadanos que las medidas de ajuste que ha tenido que tomar su Gabinete en la presente legislatura han estado motivadas por una crisis cuyo génesis «nunca se lo podrán endosar» a los socialistas.

Las últimas intervenciones del secretario general del PSOE se escrutan en clave de primarias. En Albacete, en presencia de José María Barreda -uno de los barones que más presionó para que desvelara su futuro-, José Luis Rodríguez Zapatero no mencionó ni a Alfredo Pérez Rubalcaba ni a Carmen Chacón. Sí lo hizo, para satisfacción de los que aún defienden la existencia de una 'tercera vía', de José Bono, del que resaltó «su comportamiento ejemplar».