Ciudadanos

Detienen en El Bosque a El Lute serrano, el último bandolero

La Guardia Civil despliega un enorme dispositivo para arrestar a este supuesto prófugo, que se tiró al monte para huir de la Justicia

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

En El Bosque y los pueblos de alrededor, se había convertido en una extraña leyenda viva, que algunos temían y otros consideraban casi romántica, heredera de los bandidos que poblaron la Sierra en el siglo XIX. Unos le llamaban El Lute porque, como Eleuterio Sánchez, El Lute original, se había escapado de la Justicia. Otros también lo conocían como Pasos Largos, un nombre heredado del último bandolero que holló los montes de la serranía de Ronda hace siglo y medio. Y es que, como este último, también este vecino de Benamahoma, de unos 35 años o 40 años, se tiró al monte como un prófugo. Hace años que los vecinos de El Bosque saben que andaba cerca, escondido en algún lugar perdido de la sierra de El Labradillo. Pero nadie recuerda cuánto hace que llegó allí. Quizá cuatro o cinco años. Alguna vez, lo vieron bajar a comprar a El Bosque (donde tenía familia), aunque según se decía vivía en la Sierra de lo que cazaba de manera furtiva. Los cazadores de la zona lo conocían bien y a veces, le habían comprado alguna pieza. Pero hasta ahora nadie lo había capturado.

Finalmente, la madrugada del pasado jueves, El Lute o Pasos Largos, fue detenido por la Guardia Civil en un espectacular dispositivo en el que participaron más de medio centenar de agentes, perros de búsqueda y hasta unidades especiales que fueron trasladadas especialmente desde Sevilla. La llamativa llegada de vehículos no pasó desapercibida en El Bosque, algunos contaron hasta 20, pero a él lo pillaron por sorpresa.

La guarida donde se escondía no era ninguna fortaleza: vivía en un par de tiendas de campaña situadas junto a un huerto, en el que tenía gallinas y hasta un chivo, situadas en alguna zona abrupta y escondida entre las fincas del Cortijo Amarillo y el Valdiviés. Sin embargo, como pasaba con los bandoleros del siglo XIX, el halo romántico que en el pueblo le habían colocado parece ocultar a un tipo extremadamente peligroso y violento, al que se le achacan algunos robos y el atraco a punta de rifle de una gasolinera de El Bosque, cometido hace un mes. Según fuentes consultadas, también se le atribuye un reciente suceso con dos guardias civiles, a los que habría encañonado supuestamente cuando lo sorprendieron. Toda prudencia parecía resultar poca para detenerlo.

De nuevo trató de huir

Cuando los agentes llegaron, El Lute estaba acompañado por una mujer, al parecer familiar suya y menor que él. Al oír que lo rodeaban, Pasos Largos se armó supuestamente con una escopeta repetidora, y de nuevo trató de huir corriendo. Sin embargo los agentes, pertrechados con perros y equipos de visión nocturna, estaban preparados para buscarle en la espesura. Cayó la leyenda y ahora quizá se aclare si las hazañas que le atribuían no tenían nada de románticas.