Artur Mas congela el debate independentista en Cataluña
BARCELONA. Actualizado: GuardarArtur Mas templa el tono soberanista. Una semana después de que Jordi Pujol anunciase que se ha hecho independentista y cinco días antes de la celebración de la consulta en Barcelona sobre la autodeterminación, en la que ya han votado Pujol y Mas, el presidente de la Generalitat rebajó la euforia de los sectores más independentistas de su partido.
El jefe del Ejecutivo insistió ayer en que la independencia de Cataluña no es su prioridad para esta legislatura. La apuesta es el pacto fiscal, dijo, porque es un proyecto que cuenta con el apoyo de «mayorías sociales sólidas». Defendió, no obstante, su derecho, como ciudadano, a votar en la consulta soberanista. Una participación, en opinión del 'president', que no irá más allá, ya que su 'Govern' no promoverá ninguna iniciativa en esta dirección. «Debemos centrarnos en el programa y en aquello que en este momento hace más piña dentro de Cataluña», afirmó. La semana próxima el Parlamento catalán debatirá una proposición que pretende proclamar la independencia unilateral. Salvo sorpresa, CiU votará en contra o se abstendrá.
Mas, que el lunes fue recibido con una fuerte protesta en Tarragona y ante el temor de que el malestar se contagie, ha multiplicado sus comparecencias para explicar sus primeros cien días. Un arranque, que ha estado marcado por los problemas financieros y los ajustes sociales. Por ello, Mas, que anunció la supresión del impuesto de sucesiones, pidió el apoyo de la oposición, la sociedad y los medios de comunicación para que ayuden al Gobierno a justificar los recortes. Se trata, dijo, de no crear temores innecesarios. «La gente no es tonta y es consciente de las dificultades», afirmó.