Redondo asegura que Millán «echa leña al fuego» con sus declaraciones

«El presidente está en el despacho y nosotros en el terreno de juego». Esa fue ayer la clara respuesta de Juan Luis Redondo al presidente de la entidad azulina Antonio Millán, quien el martes aseguraba que el objetivo del Xerez es meterse en la fase de ascenso. El lateral sevillano aclaraba ayer que no entendía que fuera una obligación, ya que «hay tantas cosas que son obligatorias y sin embargo no se llevan a cabo, y no pasa nada». El sevillano aclara que «por el bien del club, de los jugadores, de la afición y de todo, lo más importante sería lograrlo, pero sin tirarnos piedras sobre nuestro tejado», ya que «para mí, es echarle un poquito de leña al fuego. Dentro del vestuario pensamos que jugar la fase de ascenso sería importantísimo por el bien de todos, pero hay que ir paso a paso y no porque el año pasado estuviéramos en Primera tener la obligación se subir». Es por ello que Redondo abogue por no llevar «esa carga, sino seguir trabajando y al final del campeonato ver si podemos pelear o no por el ascenso».

Para ello hay que comenzar puntuando este sábado en el Nuevo Colombino en el derbi andaluz ante el Recre, un equipo que, según Redondo, «desde que cambió de entrenador ha ido de mucho menos a más y a la vista está que el fin de semana pasado consiguió la victoria en un campo complicado». Además, el defensa destaca que en su casa el Recre «es un equipo correoso y complicado», pero resalta que el Xerez tiene «armas suficiente para lograr los máximos puntos posibles y volver a casa con el trabajo hecho».

Respecto a su suplencia el pasado domingo ante el Granada, Redondo ha afirmado que «todo profesional lo que quiere es jugar y te sorprende porque no te lo esperas. Venía de jugar un partido, bajo mi punto de vista, bastante correcto, donde se ganó en Villarreal, pero sabemos que siempre por encima de uno hay una cabeza visible y una persona que es la que toma las decisiones y me tocó a mí bailar con la más fea». Redondo añade que «ahora uno va con el pensamiento de que si fallo o no fallo, si juego o no juego bien, pero si lo haces mal lo más probable es que no juegues». Sin embargo, el sevillano matiza que «para eso está el día a día, para trabajar y ponérselo difícil al entrenador, que para eso es el que pone el equipo». El de Camas resalta que «cuando el equipo gana, soy del pensamiento de que el once se debe tocar lo menos posible porque la cosa ha salido bien, pero está claro que cuando uno ve que un compañero va en la lista, que exista esta pelea por un puesto, es beneficioso para el equipo, aunque si habitualmente no viene entrando, por lo que sea, pues uno entiende que hay que ir con el freno de mano porque puede pasar cualquier cosa». Para finiquitar con el asunto, Redondo reconoce que «igual el entrenador quiere otras cosas diferentes y toma esa decisión, pero ya digo que yo estoy aquí para entrenar y trabajar bien. Que el día del Villarreal lo hice bien o no, si me preguntan a mí, diría que sí, si le preguntan al entrenador pues él puede ver que he cometido muchos fallos y era momento de cambiarme, pero eso habría que preguntárselo al entrenador», un entrenador con el que no ha hablado porque entiende que «sería una falta de respeto hacia mis compañeros».