Restricciones a la información electoral en las televisiones privadas

La Junta Electoral Central dio ayer a conocer una serie de instrucciones para que los partidos políticos, instituciones y medios de comunicación se adapten a la nueva legalidad durante la campaña de los comicios municipales y autonómicos de mayo.

Una de las más polémicas será la que obliga a las televisiones privadas a realizar una cobertura informativa de la campaña casi con las mismas restricciones que los medios públicos. No es un capricho de la Junta sino el desarrollo de lo dispuesto en la reciente reforma legal aprobada por PSOE, PP, CiU y PNV. La información electoral de las televisiones privadas deberá organizarse, valorarse y minutarse atendiendo a los resultados obtenidos por cada formación en las elecciones equivalentes de 2007. Las noticias que se den de partidos sin representación no podrán superar en tiempo o importancia a las de la fuerza con menos concejales o parlamentarios.

El control es especialmente estricto en las entrevistas o debates. «Si emite un debate entre los dos candidatos que obtuvieron mayor número de votos en las últimas elecciones deberá emitir otros debates bilaterales o plurilaterales, o proporcionar información compensatoria suficiente, sobre los demás candidatos que también hayan conseguido representación en las últimas elecciones equivalentes», detalla la Junta Electoral.

Los magistrados solo han aceptado algunas de las peticiones que PSOE y PP les hicieron para dulcificar los límites a la precampaña electoral que ellos mismos aprobaron en la reforma de enero pasado. La Junta considera que la prohibición legal de inaugurar obras públicas o de realizar campañas publicitarias institucionales -que realmente son de autobombo- hasta el día de las elecciones alcanza también a las visitas de políticos a estas infraestructuras en construcción o a la edición de libros o materiales en cualquier otro formato para destacar logros de su gestión.

Las instrucciones sí han sido más permisivas con las reclamaciones de los dos grandes partidos sobre la publicidad en precampaña. Queda prohibida toda publicidad de partido en cualquier medio o soporte, pero se permiten los carteles o cuñas para anunciar mítines y el uso de coches privados con fotografías de los candidatos que recorran las poblaciones. También se autoriza la creación durante este período de páginas web, blogs, folletos o mensajes en redes sociales que difundan los programas de cada partido o sus candidatos. Sin embargo, las formaciones no podrán repartir hasta la campaña bolis, mecheros, pin o llaveros con fotos o sus siglas y lemas.