Fernando Alonso marcó el tercer mejor tiempo en los entrenamientos. :: AFP
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Aviso a Alonso y Vettel: McLaren ha vuelto

La degradación de los Pirelli será una de las claves en Australia, donde se espera un inicio de Mundial lleno de incertidumbres Button y Hamilton lideran los libres, y Alonso y los Red Bull se mantienen en la zona alta

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Lo avisaron en la semana previa al Gran Premio de Australia, y en la segunda sesión de entrenamientos libres lo confirmaron: McLaren ha superado sus dificultades y luchará de tú a tú con los Red Bull y los Ferrari. El mejor tiempo de Jenson Button en la primera jornada en Melbourne no hace más que refrendar ese segundo que decía Martin Whitmarsh que habían recuperado. Lewis Hamilton, a poco más de una décima de su compañero, comandará el ataque de McLaren contra la dupla Red Bull-Alonso. Felipe Massa aún está lejos: fue séptimo.

Las sensaciones que dejó Fernando Alonso fueron muy positivas. Exceptuando un pequeño, ínfimo problema, que le mantuvo más tiempo en boxes, pudo completar un total de 48 vueltas en su primer gran premio con Pirelli y demostró un ritmo muy constante. La subviración que le provocaba el juego de neumáticos blandos le obligaron casi a pelearse con el F150 Italia, pero sin mayores complicaciones, más allá de alguna excursión esporádica por la zona de fuera de la pista.

Más preocupante es la situación de Hispania Racing. La escudería española gastó el jueves uno de los 'comodines' que establece la FIA para los mecánicos de cara a los entrenamientos. Según las normas, no se puede tocar ningún coche durante la noche previa a la jornada de entrenamientos libres. Un toque de queda que se puede saltar hasta cuatro veces en una temporada. Sudando tinta, consiguieron al fin sacar a Vitantonio Liuzzi a pista para que diera una vuelta, la primera del F111, ya que en pretemporada ni siquiera pudieron estrenarlo. Con estas dificultades se antojaba harto difícil que pudieran entrar dentro del margen del 107% de la 'pole' de este sábado, una norma que regresa a la Fórmula 1 impulsada por Ecclestone, para evitar que 'hierros' se paseen por los circuitos y estropeen el espectáculo.

En el caso del Jaime Alguersuari, el piloto catalán se asienta. En la segunda sesión demostró que los galones de Toro Rosso están muy definidos. Tandas largas, pocos errores y siempre por delante de su compañero Buemi, el piloto español de 21 años recién cumplidos marcó el undécimo tiempo y confirmó que la escudería va a intentar luchar por los puntos.

El DSR y los Pirelli prometen

El uso del alerón trasero móvil (DSR) ya se vio en acción en Australia. La FIA informó que en caso de lluvia se limitará su uso, pero mientras tanto, será uno de los elementos básicos en algunas zonas (concretamente la curva 14 de Melbourne) para facilitar los adelantamientos. Todos los equipos lo probaron, y funciona a la perfección.

Si promete el DSR, los Pirelli serán fundamentales. La intensa degradación que padecen los blandos -señalados con letras amarillas, a diferencia de los duros, que son plateadas- hace que su momento óptimo dure entre tres y cuatro vueltas, y eso siempre que la temperatura de pista no sea muy alta. Quien más y quien menos tuvo alguna salida de pista, lo que augura muchos sustos. Mínimo, tres paradas en boxes es la previsión que manejan las escuderías.

Por otra parte, Sergio Pérez demostró que no solo el dinero de Carlos Slim le ha subido a un monoplaza de Fórmula 1. El mexicano sorprendió con un octavo tiempo, superando no solamente a su compañero Kobayashi, que finalizó 15º, sino también a hombres consagrados como Rubens Barrichello o Nico Rosberg.

En definitiva, el Mundial de Fórmula 1 ha dado su pistoletazo de salida y Fernando Alonso ha sido el más regular de los presumibles favoritos, Red Bull apuesta por esconder sus cartas, en una estrategia que el año pasado les funcionó a las mil maravillas, y McLaren quiere ser el tercero en discordia. La zona media de la parrilla está insoportablemente igualada y por abajo lucharán por no quemarse en el infierno del 107%. Y, encima, podría llover. ¿Emoción? No. Lo siguiente.