El detenido, a través de la luna del vehículo. :: A. VÁZQUEZ
Ciudadanos

Vecinos de Cádiz tratan de impedir una detención policial

Los antidisturbios se vieron obligados a intervenir ayer en el incidente, mientras se arrestaba a un sospechoso de robo

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La tranquilidad del Cerro del Moro se vio alterada al mediodía de ayer en un enfrentamiento entre vecinos y la Policía, en la confluencia de las calles Setenil y Cristina López, que hizo necesaria incluso la presencia de grupos antidisturbios pertrechados con escudos y armas de disuasión. Los habían requerido varios agentes, a los que los vecinos trataban de impedir que detuvieran a un hombre, al que minutos antes habían denunciado por un supuesto robo.

El suceso que desembocó en el incidente, ocurrió alrededor de las 10 de la mañana, cuando la dueña de una vivienda en la calle Setenil de las Bodegas denunció que un hombre había entrado por la ventana de su vivienda y tras destrozar el interior de la casa, robó algo en su interior.

Según fuentes policiales consultadas por LA VOZ, una patrulla de 'zetas' se desplazó hasta el barrio y cuando se entrevistaba con la mujer, ésta identificó en plena calle a al que según ella había asaltado su vivienda.

Cuando los agentes trataron de pedirle su identificación, el hombre salió corriendo supuestamente para huir. Y al alcanzarlo los agentes, se resistió y arremetió supuestamente contra ellos, con gritos de auxilio.

Ante el alboroto de la detención, acudieron de inmediato a la calle una avalancha de vecinos y familiares del sospechoso que, según las mismas fuentes consultadas, increparon y se enfrentaron a los policías para impedir que se llevaran a aquel hombre, llegando supuestamente a lanzar algunos objetos. En la refriega acabó destrozada la luna trasera de un vehículo policial y uno de los policías resultó herido leve, según confirmaron las mimas fuentes.

Ante la amenaza, los agentes requirieron refuerzos de otros vehículos zetas, que se desplazaron hasta la zona. Pero la situación se agravaba, así que se vieron obligados a solicitaron el apoyo de agentes de la unidad UPR, para sofocar la revuelta vecinal. El enfrentamiento fue tal que los antidisturbios llegaron a sacar sus escudos y armas disuasorias. Algunos vecinos llegaron a ser cacheados y se les requirió la identificación -como muestran las imágenes-, pero sólo se detuvo a 'Nono'. Según fuentes judiciales, éste solicitó ayer el 'habeas corpus', ya que según él no cometió el robo.

Tras la actuación policial, los ánimos se fueron calmando poco a poco y a partir de la una de la tarde la tranquilidad regresó al barrio. Por la tarde, mientras algunos coches de Policía regresaban a la zona, el mutismo reinaba entre los vecinos. Algunos decían no haberse siquiera enterado: «Algo he oído, pero no sé lo que ha pasado». Pero otros, directamente, negaban los hechos: «Aquí no ha pasado nada». Con todo, el enfrentamiento se convirtió en la comidilla de bares y cafeterías, donde se repetía una triste evidencia: «El barrio está dando pasos atrás otra vez, después de lo que había mejorado».