Editorial

Rescate de Portugal

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El primer ministro portugués, el socialista José Sócrates se vio ayer abocado a la dimisión después de que su Programa de Estabilidad y Crecimiento, el llamado PEC IV, exigido por Bruselas, no consiguiera el suficiente apoyo parlamentario. La principal fuerza de oposición, el conservador Partido Social Demócrata de Pedro Passos Coelho, compartía los objetivos del Programa pero no los recortes que lo sostenían -en pensiones, sanidad, educación, prestaciones sociales e inversión pública- ni la subida de impuestos que lo acompañaba. El naufragio portugués, en vísperas del decisivo Consejo Europeo que aprobará el Pacto por el Euro, obligará con toda probabilidad al país luso a solicitar el rescate de su economía. Por fortuna, la crisis tiene lugar cuando la economía española ha conseguido afianzarse en los mercados, que ayer mantenían la prima de riesgo española en 208 puntos básicos, frente a los 517 de la portuguesa. De cualquier modo, la elevada cantidad de deuda portuguesa en manos españolas lastrará nuestra difícil recuperación, que ya está sobrada de problemas.