Desarticulada una red que introducía cocaína en la prisión de Córdoba
La Operación 'Horco', culmina con cinco detenidos y más de 850.000 dosis de cocaína aprehendidas
SEVILLA. Actualizado: GuardarLa Guardia Civil ha dado por cerrada en Córdoba la denominada Operación 'Horco', que se ha saldado con cinco detenidos y la aprehensión de más de 850.000 dosis de cocaína. El grupo desarticulado contaba con laboratorio propio y distribuía droga en la prisión cordobesa, dos de cuyos funcionarios están entre los detenidos.
Según informó ayer la Guardia Civil, los detenidos en Córdoba son: S.S.E., de 49 años; M.A.V. de 46 años; M.G.P., de 31 años, y a los hermanos A.J.M.U., de 37 años, y J.M.M.U., de 23 años, siendo éstos dos últimos quienes ejercían la dirección del grupo desmantelado. Todos los detenidos son vecinos de Córdoba y entre ellos conformaban el grupo delictivo dedicado al tráfico de drogas que ha sido desmantelado por Benemérita y que presenta la peculiaridad de contar entre sus puntos de distribución de droga con el Centro Penitenciario de Alcolea, contando para ello con los dos funcionarios de la cárcel ya detenidos.
La operación se inició el pasado mes de noviembre, al tener la Guardia Civil las primeras informaciones que apuntaban a la existencia de un grupo de personas que, con el apoyo de algún funcionario de prisiones, estaba introduciendo droga, esencialmente cocaína, en el Centro Penitenciario de Alcolea, para su posterior distribución entre los reclusos que cumplen condena en el mismo.
Una vez iniciadas las investigaciones, la Guardia Civil pudo saber que con el grupo de presos que realizaba la distribución de la cocaína en el interior de la prisión mantenían unas relaciones muy «particulares» dos funcionarios de Instituciones Penitenciarias, por lo que se centraron las investigaciones sobre ambos funcionarios, para lo cual ha resultado imprescindible contar con el apoyo permanente de los responsables de la prisión.
Tras las primeras semanas, los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil llegaron a la conclusión de que los dos funcionarios de prisiones podían ser quienes se encargaban de introducir la cocaína en los módulos del centro penitenciario, por lo que se procedió a judicializar la Operación 'Horco'.
Con el avance de la operación la Guardia Civil pudo concretar que los dos funcionarios de prisiones investigados podían estar integrados en una organización delictiva perfectamente estructurada y jerarquizada, dedicada al tráfico y distribución de drogas y bajo el liderazgo de un ex recluso, A.J.M.U., que había cumplido recientemente condena en el propio Centro Penitenciario de Alcolea,
La Guardia Civil supo que mientras A.J.M.U. estuvo encarcelado y a través de su hermano, J.M.M.U., había podido seguir dirigiendo el grupo delictivo, preparar las operaciones de compra, venta y distribución de la cocaína, encargándose su hermano de todo lo relacionado con las negociaciones ilícitas en el exterior de la prisión.