La candidata del PP a la presidencia de Asturias, Isabel Pérez-Espinosa, aplaudida por Rajoy. :: EFE
ESPAÑA

Rajoy apela en Asturias al voto útil para frenar el 'efecto Cascos'

Aseguró, en su primera visita al Principado tras la escisión, que «la única garantía del cambio» es la victoria del PP «aquí y en España»

GIJÓN. Actualizado: Guardar
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Nadie nombró a Francisco Álvarez Cascos, pero estuvo presente en todos los discursos. Mariano Rajoy, en su primer acto político en Asturias tras el portazo y la escisión encabezada por el exvicepresidente de José María Aznar, lanzó un claro mensaje: si el centro-derecha quiere volver a gobernar el Principado hay que olvidarse de opciones personalistas y de siglas sin respaldo en España y en Europa y concentrar todos los votos en la lista del PP. «La única garantía del cambio en Asturias y en España es la existencia de gobiernos del PP, aquí y en Madrid», resumió en un evidente llamamiento al cierre de filas y al voto útil.

Rajoy, ante unos 2.000 dirigentes y simpatizantes del partido entregados, que abarrotaron el teatro La Laboral de Gijón y le jalearon durante la media hora de discurso, reivindicó la fortaleza política de las siglas del PP frente a sucedáneos locales, como dio a entender que es Foro Asturias, el partido recién fundado por Cascos y con el que aspira a ser presidente del Principado. «Aquí caben todos, es un partido grande, el partido del centro y la derecha española, el nuestro, el que queremos, el que nos gusta», comentó, al tiempo que destacaba que, además, es también «la referencia de millones de españoles», incluidos muchos votantes socialistas hastiados por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

El presidente popular suministró a los conservadores asturianos al menos otros tres argumentos más para ignorar a Cascos y concentrar el voto en el PP. Explicó que la recuperación económica de Asturias solo será posible con un Ejecutivo que coordine sus políticas con el nacional -del que no dudó que estará al frente en 2012- y que tenga influencia en la Unión Europea. Además, y para contrarrestar el esperado mensaje en tal sentido del exvicepresidente Cascos, reiteró que los únicos herederos de las políticas y los logros de los ejecutivos de Aznar son él y su partido.

«Necesitamos un gobierno del PP en Asturias con el que nos podamos entender -desde Madrid-, un gobierno moderado con el que dialogar y pactar un plan para reactivar la economía y el empleo», dijo. «Un gobierno que necesitará mucha ayuda en Madrid y en Bruselas» para trabajar en aspectos fundamentales para la zona como la minería del carbón o la mejora de las infraestructuras, añadió.

Con doble destinatario, los 'casquistas' y los desencantados con Zapatero, subrayó que son «un partido que cuando gobernó España supo gestionar las condiciones para crear cinco millones de empleos». Criticó a un PSOE «resignado a convivir con el desempleo» y que transmite que el paro es «algo contra lo que no se puede luchar» y aseguró que su partido, cuando el año que viene llegue al Gobierno, volverá a crear puestos de trabajo. «Lo hicimos en su día y lo volveremos a hacer», señaló entre aplausos.

Sin nostalgias

Rajoy reclamó al partido en Asturias el «respaldo y apoyo» para la candidata popular a la presidencia del Principado, Isabel Pérez-Espinosa, y le dio el suyo «personal», porque «nadie puede hacer nada solo». Ninguno de los dos buscó desde la tribuna la confrontación directa con Cascos, pero, sin nombrarle, se reafirmaron en el acierto de no haber aceptado sus imposiciones, pese a que les haya costado una escisión y un enemigo.

El presidente popular sentenció: «Se acabaron las marchas atrás, eso ya no existe. Nosotros estamos en el futuro y el futuro es el cambio, un gobierno del PP aquí y en España». Pérez-Espinosa coincidió en que «el futuro no puede pasar por la nostalgia, la revancha y el aislamiento político», y destacó que «el primer mandamiento en el PP es la lealtad a las siglas y al proyecto».

No obstante, y aunque los dos ratificaron que ya no hay marcha atrás, también dejaron claro en sus palabras que no desprecian, e incluso temen, las opciones electorales y el daño en las urnas que puede hacerles en el campo del electorado conservador un Foro Asturias encabezado por Cascos. De hecho, son varias las encuestas que han vaticinado que el exministro obtendrá un muy buen resultado en mayo en la comunidad y alguna hasta le da la victoria. La candidata que opondrá el PP reclamó a los simpatizantes: «No votéis a quien obstaculiza el cambio». Rajoy se despidió del auditorio con una incitación a la pelea electoral, que anticipó dura. «La única batalla perdida es la no dada. Este es un partido de gente dura y aguerrida. La situación por la que pasa Asturias no es fácil, pero la historia demuestra que en los momentos de dificultad es cuando se demuestra lo que es, y el PP es el mejor partido», arengó.