El IPC continúa su alza imparable arrastrado por el petróleo

El alza del petróleo no da tregua al Índice de Precios al Consumo (IPC), que continúa con su avance imparable iniciado en el último mes del año pasado. En febrero la inflación anual aumentó un 0,3%, que hay que sumar a otras subidas de tres y siete décimas registradas en enero y diciembre, hasta alcanzar el 3,6%, su valor más elevado desde octubre de 2008. Respecto del mes anterior, los precios aumentaron una décima, según los datos definitivos publicados por el INE.

La tasa interanual del 3,6% coincide con el valor del indicador adelantado del IPC publicado el pasado 28 de febrero. El Gobierno explicó en un comunicado que una de las tres décimas de inflación del segundo mes se explica por el encarecimiento de los combustibles, la segunda por el aumento de precios de servicios como los viajes, los restaurantes y los seguros, y la tercera casi en su totalidad por la menor caída intermensual de los precios de los alimentos este año con respecto al anterior.

Entre los grupos de bienes y servicios que más influyeron en el incremento de la tasa anual destaca el transporte, cuya variación anual fue del 10% por la subida de los carburantes y lubricantes, la más alta registrada desde julio de 2008, cuando el barril de crudo de Brent marcó su récord histórico de 147 dólares el barril. Ayer por la tarde costaba en Londres 'solo' 113,5 billetes verdes la unidad, después de caer su cotización 1,93 dólares respecto del jueves, debido a la reacción del mercado ante el devastador seísmo que sufrió Japón.

Los alimentos y bebidas no alcohólicas cerraron febrero con una subida interanual del 1,5%, seis décimas superior a la de enero. Los artículos que más influyeron en ese encarecimiento fueron los aceites, la carne de ovino y los otros productos lácteos. La variación anual del grupo de servicios de ocio y cultura aumenta ocho décimas y alcanza el -0,2% debido al incremento de los precios de los viajes, que contrasta con la bajada que experimentaron hace un año. Las bebidas alcohólicas y el tabaco se han encarecido un 14,5%. Pese a todo, esa subida es un punto y medio inferior a la registrada en febrero del año pasado, cuando los precios del tabaco aumentaron en mayor medida.

Inflación subyacente

La tasa de variación interanual de la inflación subyacente -que excluye el precio de los elementos más volátiles de la cesta, como los alimentos frescos y la energía- también subió, dos décimas respecto de enero, y marcó un 1,8%. El Gobierno considera que este resultado «mantiene la tasa interanual moderada que se ha ido observando en los últimos meses en los componentes que están menos sujetos a la volatilidad de los mercados internacionales».

En términos mensuales, el aumento del 0,1% del IPC general se explica por las subidas del transporte (0,8%), otros bienes y servicios (0,6%), ocio y cultura (0,6%) y la vivienda (0,3%). Por el contrario, se abarataron con respecto a enero el vestido y calzado, un 1,6%, y los alimentos y bebidas no alcohólicas, un 0,2%. El IPC armonizado aumentó cuatro décimas, hasta el 3,4%. El coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, consideró el resultado del IPC «muy negativo» porque «suben los precios y no la renta», lo que conlleva pérdidas de poder adquisitivo y competitividad. Los sindicatos destacaron que no todo es culpa del petróleo y atribuyeron parte de la subida al incremento de los beneficios empresariales. La Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) corrigió cuatro décimas al alza su previsión de inflación, hasta el 3,2% de media para el conjunto del año.