La Junta propone un distintivo común para los quesos de la provincia

«Hay que buscar un distintivo que identifique a los quesos de la provincia de Cádiz para que el consumidor pueda asociarlo a la calidad que las queserías ya ofrecen». La consejera de Agricultura, Clara Aguilera, mantuvo ayer un encuentro en Grazalema con el sector quesero de la provincia para plantearles la propuesta de la Junta de Andalucía para crear la Indicación Geográfica Protegida Quesos de Cádiz. Asimismo, los asistentes también analizaron algunos aspectos de la normativa sobre artesanía alimentaria. La producción artesanal de queso de la provincia se concentra en su mayoría en la Sierra de Cádiz, con un censo de 44.242 cabezas de caprino y 47.907 de ovino. En concreto, la provincia cuenta con siete industrias transformadoras que producen 400.000 kilogramos de quesos, en su mayoría de cabra, y generan 60 empleos y mantienen a 120 ganaderos.

Respecto a la ganadería caprina y ovina de la provincia de Cádiz, más de 800 explotaciones son de ganado caprino, con un censo aproximado de 100.000 cabezas, y que producen en torno a 19 millones de litros de leche. Por su parte, el sector productor ovino, lo componen en torno a 900 explotaciones con un censo aproximado de otras 100.000 cabezas.

Aguilera aprovechó su visita a la comarca para conocer las instalaciones de la Quesería Artesanal Sierra de Ubrique, acompañada por el alcalde Javier Cabezas (PA). Esta empresa familiar ha contado con una subvención que supera los 40.000 euros, cantidad que representa el 33,8% de la inversión de la empresa valorada en 118.029,13 euros, según la propia Consejería, para lanzarse a la producción de quesos artesanales. La ayuda está dirigida a la mejora de la comercialización de los quesos artesanos elaborados con leche de cabra Payoya, una de las razas autóctonas de la zona.

La consejera ha destacado la calidad diferencial de estos quesos al ser un producto natural y elaborado con leche de esta raza de caprino en pastoreo extensivo y mediante técnicas totalmente artesanales. Asimismo, ha recalcado la apuesta de su Consejería por un modelo de producción como el de esta empresa, artesanal y familiar, que facilite la comercialización en los mercados locales y contribuya a aumentar la renta de los productores y crear empleo en las zonas rurales.