Haití: disfraces contra la fatalidad
Actualizado: GuardarPor un día, Puerto Príncipe se quiso disfrazar de ciudad alegre y colorida y tapar así el blanco y negro de la sed, el hambre y la miseria. Disfraces contra la fatalidad. En un asombroso lance de buen ánimo, miles de habitantes de la capital se han lanzado a la calle para festejar el carnaval entre ruinas y cascotes. Le dicen 'Kanaval', y durante tres días el país entero toma las avenidas en una turbulenta mezcla de ritmos y disfraces. Un año después del terremoto en el que murieron 300.000 personas, Haití ha vuelto a reclamar su gueto de fiesta. «Si no lo hacíamos nosotros, lo hubiera hecho la gente». Esa es la tesis del Ayuntamiento de Puerto Príncipe ante las críticas de parte de la población que circuló por las principales calles. Fueron una mezcla de ritmos caribeños, amuletos y tipos diversos en reivindicación de su propio desamparo, muchos de ellos contra la comunidad internacional y los países con intereses en la isla.
Quizás la catástrofe de enero de 2010 estaba demasiado cercana.