Una conferencia sobre los jóvenes abre la Semana de la Familia que organiza la Diócesis
JEREZ. Actualizado: GuardarLa espiritualidad en los jóvenes abrió el martes el programa de reflexiones previsto en la XV Semana de la Familia que la Diócesis de Asidonia-Jerez desarrollará hasta el sábado. Acompañada por monseñor Mazuelos, obispo diocesano, Patricia Martínez Peroni, licenciada en Psicopedagogía por la Universidad Católica Santa María de los Buenos Aires, ofreció la primera ponencia.
La conferenciante diagnosticó a unos jóvenes actuales «huérfanos», que tienen en su haber «lo que nosotros los adultos les hemos dejado en herencia». En ese terreno situó a unos chicos y chicas carentes de vida espiritual porque, «hijos de su época, no han encontrado el alimento de unos determinados valores». Ello llevó a Martínez Peroni a analizar aquello que ha priorizado la educación.
«Los jóvenes están a la deriva en el tema espiritual porque no ven su atractivo, no lo ven como algo vital». Pero esto no es casual y ocurre, según la primera ponente de este ciclo, porque el modelo educativo ha «amputado la realidad espiritual» imponiendo factores que «silencian los hábitos de abstracción intelectual y más aún los propios de una vida en la que la espiritualidad tenga algo que decir».
Junto a la enseñanza de la religión también echó en falta otras como el latín, el griego o las humanidades frente a la implantación de hábitos lúdicos. «Cuando no sacamos de la naturaleza la reciedumbre, la fortaleza, el amor desinteresado y gratuito y solo fomentamos la sensualidad, el placer, el egoísmo, todo lo lúdico... no podemos exigir a un chico que tenga una conciencia moral», añadió.
La Semana de la Familia prosiguió ayer con la conferencia 'La familia, los jóvenes y la Jornada Mundial de la Juventud', a cargo del sacerdote Lorenzo Morant Pons, responsable de la organización de la JMJ en Jerez.