Mario Gómez deja al vigente campeón contra las cuerdas

El vigente campeón de Europa está contra las cuerdas. En el último minuto, Mario Gómez se encargó de hundir al Inter en el estadio Giuseppe Meazza. El Bayern de Múnich puso el fútbol y al final salió triunfante de Milán gracias a un valiosísimo tanto del delantero alemán de ascendencia española cuando el equipo italiano casi festejaba como un éxito el empate sin goles. El Inter fue excesivamente conformista en su campo y acabó pagándolo, aunque el defensor del título, que se sostiene por Eto'o, también dispuso de grandes ocasiones para llevarse la victoria.

El Bayern arriesgó más y tuvo hasta dos remates al palo, aunque debió esperar al final para que Mario Gómez aprovechase un disparo de Robben que no pudo atrapar el guardameta Julio César. Ese gol casi sepulta ya al Inter, a la espera de la vuelta el 15 de marzo en Múnich, donde este Bayern tan atrevido y peligroso debería dar la puntilla definitiva a los campeones.

Dominio teutón

El persistente equipo alemán fue el que quiso dominar desde el pitido inicial y lo logró, desactivando el medio campo local, aunque también corrió serio peligro cuando los italianos se animaron a irse arriba con velocidad. Lo intentó muchas veces el brasileño Maicon por la banda derecha, mientras que su marcador, Pranjic, tuvo que retirarse lesionado antes de que concluyese el primer tiempo, aunque no lo acusó el Bayern. Sí que tuvo que dar gracias cinco minutos antes de ese cambio a la milagrosa mano de su joven portero, Kraft, cuando Eto'o se revolvió y se sacó un espectacular latigazo con la zurda. Ahí el guardameta sí demostró reflejos. No en la segunda mitad, porque estaba bien colocado, cuando un cabezazo de Thiago Motta fue a parar a sus manos, en los momentos de mayor acoso del Inter. Los únicos a lo largo del encuentro, cuando al conjunto italiano le entraron ya las prisas, consciente de que la vuelta en Múnich se iba a presentar realmente dura.

Por no ir antes a por los goles, al final se llevó uno del Bayern, de los pies de un Mario Gómez que ha marcado once goles en diez partidos fuera de casa. Por contentarse con tan poco, acabó sin nada, aunque quede la vuelta de esta eliminatoria de los octavos de final.

A fin de centas, ya dijo Van Gaal que el fútbol del Inter, pese a perder a Mourinho, dejar por el camino a Rafa Benítez y sentar en el banquillo a Leonardo, no había cambiado nada respecto al pasado año, y no le falta razón al técnico holandés.