ESPAÑA

El rey y los políticos de la Transición recordarán en el Congreso el 23-F

Don Juan Carlos comerá con Zapatero, González, Carrillo y Fraga en el 30 aniversario y se reunirá con los diputados secuestrados por Tejero

MADRID. Actualizado: Guardar
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El rey y varios líderes políticos de la Transición comerán juntos en el Congreso de los Diputados el próximo 23 de febrero, invitados por el presidente, José Bono, para recordar el 30 aniversario del golpe de estado fallido que protagonizó el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero, quien asaltó el hemiciclo y mantuvo secuestrados hasta el día siguiente a los parlamentarios y a los miembros del Gobierno.

A la comida institucional asistirán el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el expresidente Felipe González, el exlíder del PCE Santiago Carrillo, el expresidente del Congreso en 1981, el centrista Landelino Lavilla, y los exportavoces de Alianza Popular Manuel Fraga y de CiU Miquel Roca. El almuerzo se celebrará en el comedor de honor del Congreso.

Los actos del aniversario tendrán su colofón esa misma tarde con un acto en la misma cámara al que han sido invitados de manera personal los aproximadamente 250 diputados vivos de la primera legislatura, los mismos que fueron secuestrados por los golpistas. Entre los invitados aún en activo en el Parlamento están el propio Bono, el exvicepresidente Alfonso Guerra, la popular Soledad Becerril y los socialistas José María Benegas y Juan Barranco.

En la reunión se podría ver también al comisario europeo Joaquín Almunia, al vicepresidente tercero Manuel Chaves, al expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, al ex secretario general de UGT Nicolás Redondo, al ex Defensor del Pueblo Enrique Múgica, a los exministros Carlos Solchaga y Miguel Boyer, o al europarlamentario popular Jaime Mayor Oreja.

Un político retirado que también está invitado al acto conmemorativo es el entonces líder de Fuerza Nueva, Blas Piñar. La carta de invitación de Bono les anima a celebrar estos 30 años, que define como «un período especialmente fructífero para asentar la democracia y la libertad de nuestro país».