Impulso a la rehabilitación de viviendas
Un total de 31 familias isleñas podrán acometer reformas en sus casas gracias a una ayuda de la Junta
San Fernando Actualizado: GuardarLa crisis rompe proyectos y dificulta que las ilusiones se hagan realidad. Unas 31 familias isleñas estaban a la espera de contar con dinero para poder cambiar su vida y reformar sus casas. Ahora podrán hacerlo gracias a a las ayudas que concede la Junta de Andalucía a través del programa de Rehabilitación Autonómica, que contempla subvenciones del 50% del presupuesto de ejecución material de las obras y de hasta el 70% en el caso de que el solicitante sea mayor de 65 años y titular de la tarjeta Andalucía-Junta Setenta y Cinco, modalidad Oro.
La ayuda global de la Junta a estas treinta y una familia isleñas asciende a 154.885 euros, cantidad con la que podrán hacer frente a obras presupuestadas en 294.948 euros. Además, la Junta de Andalucía asume el coste de la redacción de los proyectos y el pago de los horarios de la dirección técnica.
Las obras que se pueden acometer con este programa de rehabilitación, además de aquellas encaminadas a conseguir seguridad estructural y constructiva de los inmuebles, consisten en trabajos para eliminar la estanqueidad frente a las lluvias y las humedades. También se contemplan mejoras de la iluminación natural de la vivienda y de la ventilación interior de las mismas, la redistribución de los espacios y la renovación de las instalaciones de suministro de agua, gas, electricidad y saneamiento.
Larga espera
Según el PP, estás ayudas estaban comprometidas para el 2008 y por ello han pedido mayor agilidad en estos procesos. El delegado de Obras Públicas, Pablo Lorenzo, avisó en el acto de entrega de los proyectos que las personas que ya hayan realizado algunas mejoras, podrán modificar el proyecto siempre y cuando tengan el visto bueno de los arquitectos responsables de este programa.
La Junta transferirá el dinero al Ayuntamiento, que será el responsable de ingresarlo a las familias, la mitad cuando se haya completado el 50% de la obra y el resto al concluir los trabajos. Eso sí, las familias tendrán total libertad para contratar a las personas que consideren necesarias para las obras. «Es un programa por el que apostamos porque además de reformar viviendas da trabajo», concluyó Lorenzo.