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La crisis obliga a Irlanda a acudir a las urnas este mes
El adelanto electoral pronostica la debacle del partido hegemónico al perder el apoyo de los socios de su coalición
LONDRES. Actualizado: GuardarEl primer ministro irlandés, Brian Cowen, anunció ayer en el Parlamento el adelanto de las elecciones, previstas para el 11 de marzo, al 25 de febrero, tras perder el apoyo de los socios de su coalición, los Verdes, y en un estado de desintegración del apoyo a su partido. Cowen fue elegido por primera vez como diputado a los 24 años. Tiene 51. Su partido, Fianna Fáil, ha sido, hasta hace dos años, el partido natural de gobierno, presente en ejecutivos monocolores o de coalición durante 55 años de los 83 que han transcurrido desde su fundación.
El aún primer ministro se hizo cargo del liderazgo del partido y del Gobierno hace dos años y medio, cuando los primeros síntomas de fragilidad del 'tigre céltico' en la economía y alegaciones de corrupción desbancaron a Bertie Ahern. El mandato de Cowen ha estado marcado por la gestión de una crisis de gran magnitud.
Ahern y Cowen, diecisiete diputados del partido y cuatro ministros han anunciado su retirada de la vida pública. Un nuevo líder, Michael Martin, intentará salvar los trastos de una fuerza política que, acusada de agravar la crisis por la gestión 'amiguista' con banqueros y constructores, puede perder la mitad de los 70 diputados que tiene en un Parlamento con 166 escaños.
El último sondeo de intención de voto, publicado el domingo, da a Fianna Fáil el 16% de los sufragios. Cowen creía que si posponía las elecciones hasta la primavera su partido podría recuperar posiciones, pero los Verdes anunciaron hace diez días su retirada de la coalición. Hay un acuerdo tácito de los dos principales partidos de la oposición para formar Gobierno. El Fine Gael cuenta con la intención de voto del 34% del electorado, el partido Laborista, con el 24%. Sólo una monumental sorpresa podría evitar que su pacto defina el próximo Ejecutivo.
Están comprometidos con negociar de nuevo los términos del plan de rescate que la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional acordaron en noviembre para evitar una suspensión de pagos del Estado. Se quejan del alto tipo de interés de los préstamos concedidos por ambas instituciones. Irlanda vive un ambiente político de 'fin de régimen' y los observadores cualificados creen que se está produciendo una definición programática mayor de los partidos, que han estado históricamente divididos por su posición constitucional sobre la Irlanda unida, la gran cuestión del siglo XX.
El consenso en torno al futuro constitucional ha eliminado esas diferencias y los partidos que aspiran al Gobierno proponen cambios constitucionales profundos, que van desde la ley electoral a la creación de comisiones mixtas de nombramientos.