El urbanismo y la crisis monopolizan la primera sesión plenaria del nuevo Ayuntamiento

Nada nuevo bajo el sol, salvo el escenario. La Corporación chiclanera vivió ayer un día histórico, por cuanto celebró la primera sesión plenaria de su historia en el nuevo edificio consistorial, recién reformado.

Por lo demás, en lo referente a la temática y tono del debate, más de lo mismo. El urbanismo y la modificación de la Ordenanza reguladora del proceso de legalización de viviendas monopolizó durante más de una hora el debate. Butrón, ex-concejal de Urbanismo, calificó de «desastre» la situación urbanística de la ciudad.

El PA y el PP, por su parte, propusieron nuevas fórmulas «de consenso» para llevar a cabo la regularización. A su vez, el equipo de Gobierno defendió su actuación en la materia.

El tono del debate se enredó en varias ocasiones. Los reproches y acusaciones de «falta de transparencia» fueron en aumento entre los portavoces socialistas y la oposición. Las elecciones municipales están cerca, y todos los partidos aprietan los dientes.

El aspecto más destacado de la sesión fue la aprobación de la modificación puntual del PGMO para permitir la realización del proyecto de construcción de las dos torres en la Iglesia Mayor.