LA MODA 'REVIVAL' DE JEREZ
Después de 24 años como alcalde y cuatro como concejal de Urbanismo, Pacheco vuelve a la política «como nuevo»La Junta ha ofrecido a sus empleados de Justicia trabajar horas extra por la tarde; quizá debería haberlo hecho con parados
Actualizado: GuardarLos clásicos nunca pasan de moda. Fíjense en el traje de chaqueta, el palabra de honor o el príncipe de Gales por citar sólo algunos casos. En Jerez, que para estas cosas somos muy despabilados, nos hemos dado cuenta del tema, y hemos decidido apostar por todo lo revival, hemos querido rebuscar en el baúl de los recuerdos y desempolvar muchos de nuestros hitos e iconos del pasado para traerlos a la rabiosa -nunca mejor dicho- actualidad. Y así, señoras y señores, niños y niñas, ha nacido la moda revival de Jerez. Estaba claro que lo primero que había que hacer era devolver a Pedro Pacheco a su pedestal. Y ahí está el tío. Después de 24 años como alcalde y cuatro como delegado de Urbanismo interruptus, Pacheco vuelve «como nuevo». Ya lo decía uno de sus más comentados lemas electorales: «¿Quién si no?» Desde luego, lo mejor para ser coherentes con nuestro nuevo estilo de moda era rescatar del olvido al sempiterno alcalde jerezano. Pero no contentos con esto, también hemos llamado a Joaquín Bilbao para que vuelva a ser presidente del Xerez Deportivo. Algunas voces indicaban que no era lo suficientemente revival, que hubiese quedado mucho mejor Gutiérrez Murillo, pero el hombre no estaba por la labor. Se dice que para completar la jugada podríamos fichar en el mercado de invierno a Dante Adrián Sanabria, Orbegozo y Dieguito. Quedarían de lujo. Otra de las medidas impactantes que hemos tomado es meter en la maquina del tiempo al aeropuerto de Jerez y restablecer el número de pasajeros que tenía hace seis u ocho años. Últimamente, el aeropuerto se estaba desmadrando con casi dos millones de viajeros al año, y eso no puede ser. Mucha gente, 'joé'. No obstante, en el terreno económico, donde más claramente se nota el toque revival es en el número de parados. Da gusto volver a las cifras de la década de los ochenta. Qué digo volver, las hemos mejorado. Ya tenemos 30.000 personas en el paro. No me digan que no es todo un clásico de nuestra ciudad esto de la falta de trabajo. Otra línea fundamental para defender nuestro estilo clásico es mantener en su sitio las tendencias. Por ejemplo, ahí sigue José Manuel Trillo como secretario local de Comisiones Obreras. ¿Cuántos años son ya? Observen también la imagen vetusta e inconfundible de nuestros autobuses urbanos, que ahí continúan, cayéndose a pedazos, pero con ese inigualable sabor añejo y revival. Y qué decir de barrios y zonas como Estancia Barrera, la carretera del Calvario, Federico Mayo o El Chicle, donde después de tantos años de democracia parece que no ha pasado el tiempo. Es verdaderamente magnífico. Sin embargo, y mira que lo teníamos bien pensado, echo en falta algunos detalles para completar como Dios manda la moda revival de Jerez. Por ejemplo, deberíamos haber recuperado los niveles de venta que tenía el vino de Jerez en las décadas de los setenta y ochenta, o el número de puestos de trabajo que generaban en la ciudad las bodegas del Marco, o el prestigio y aceptación que tenía la Feria de la Vendimia. También se nos ha olvidado rescatar la Fórmula Uno para el circuito de Jerez, como ataño; o lograr que las chimeneas de la fábrica de botellas vuelvan a echar humo y así podamos saber cómo sopla el viento antes de ir a Valdelagrana en veranito. La verdad es que se nos han olvidado cosas. Pero no importa. Echen un vistazo a Jerez y no me digan que no lo hemos conseguido, que no parece que seguimos anclados en el Jerez de hace veinte años. Desde luego, esto del revival es un gustazo.