La utopía de la ciudad deportiva

Lo que ha sido un sueño para muchos puede convertirse en realidad dentro de poco. La ciudad deportiva del Xerez, eso que andaron buscando desde Pedro Pacheco a Joaquín Morales, pasando por Oliver, Souza o Gil Silgado, ha echado a andar cuando Pilar Sánchez ha descubierto el nuevo proyecto de 60.000 metros cuadrados que se construirá en la zona de Guadabajaque, junto al campo de golf. Pero, ¿cuándo arranca esta carrera hacia lo imposible?

Todo comenzó allá por el siglo pasado, cuando Pedro Pacheco, alcalde por aquel momento de la ciudad, y Luis Oliver, cerraban la construcción de la ciudad deportiva del Xerez, la cual estaría ubicada en unos 20.000 metros cuadrados de los terrenos del recién creado parque empresarial de Jerez. Por aquel entonces, el proyecto contemplaba la creación de cuatro campos de fútbol, un centro de tratamiento deportivo, gimnasio, sauna y hasta residencia de alojamiento. Poco después, esos terrenos fueron destinados a la construcción de viviendas. Fue el comienzo de un no parar de promesas incumplidas que a menudo rozaban el ridículo y, por casualidad, coincidían siempre en año electoral.

Sin embargo, la crisis entre Oliver y Pacheco aparcó este primer proyecto hasta 2003. Algo que, además, coincidirá con el cisma que se vive dentro del Ayuntamiento de Jerez, con García Pelayo de alcaldesa y Pachecho ahora como delegado de Urbanismo. A eso habría que sumar la llegada de Gil Silgado, el cual también promete seguir adelante con el proyecto de la ciudad deportiva. Aparecen de pronto 80.000 metros cuadrados en la pedanía de Estella del Marqués que se cederían al club, aunque García Pelayo destaca que su uso no sería exclusivo del Xerez, algo que no ve con buenos ojos Gil Silgado.

La propuesta se queda en el olvido y llega Joaquín Morales con, como no, la idea de dotar de patrimnonio al club, comenzando por la ciudad deportiva. El nazareno arriba con un discurso que seis años después repetirá Federico Souza. Sin embargo, el guion varía, ya que el flamante presidente del Xerez aboga por comprar él mismo los terrenos, algo que choca frontalmente con la idea principal de Pedro Pacheco, copiar la idea de la ciudad deportiva del Cádiz en El Rosal (propiedad de Diputación, aunque de uso del equipo amarillo, así como de equipos de fútbol base).

Morales augura que en año y medio el Xerez ya podría utilizar la ciudad deportiva, mientras que Pacheco busca suelo municipal para ceder al propio Morales. Pilar Sánchez lleva pocos meses en la alcaldía y salen a la palestra los terrenos cercanos a la barriada de La Granja, una parcela de casi 60.000 metros cuadrados y que en un futuro se convirtió en instalaciones deportivas, aunque ni fueron tantos metros ni para uso del conjunto azulino. Pasan los meses y no se concreta nada. Morales se muestra cansado de esperar y Pacheco especifica que será la futura Fundación del Xerez Deportivo quien se haga cargo de la gestión de las instalaciones.

Llega 2007, año electoral, y Pacheco sugiere otra idea: incluir la ciudad deportiva en el Plan General de Ordenación Urbanística que servirá para recalificar los terrenos de Ikea.

Guadabajaque

Pero surgen Fouto y los socios de Compás y Gestión y por primera vez se citan desde Alcaldía los terrenos de Guadabajaque. El proyecto pasa al olvido después de las municipales. El batacazo de Pacheco en las elecciones deja de lado los primeros proyectos y es cuando la ciudad deportiva del Xerez deja de ser necesaria, a pesar de las constantes críticas de los entrenadores que pasan por el club y que tienen problemas a la hora de buscar terrenos donde entrenar. Joaquín Bilbao trata de avanzar las negociaciones con Diputación, aunque es con Federico Souza cuando, en 2010, se activa la utópica idea.

El argentino de la plata y el patrimonio desvela a Pilar Sánchez que va a adquirir unos terrenos, los cuales al final no convencen por sus dimensiones. Con la espantada de Souza llega la hora de la Fundación. Pilar Sánchez retoma la idea pionera de Pacheco y quiere que sea la fundación quien gestione las instalaciones, aunque es el propio organismo quien busca los primeros terrenos en El Portal. Por su parte, Ayuntamiento y Diputación contemplan llevar la ciudad deportiva cerca del Circuito de Jerez, en un suelo del ente provincial. Especulaciones al margen, lo cierto es que después de más de una década y con localizaciones a veces imposibles, el proyecto de la ciudad deportiva y su utópica construcción han escrito esta mañana un nuevo capítulo en esta historia de nunca acabar.