«Espero que el gol me sirva para recuperar la confianza»

Mario Bermejo comienza a ver la luz al final del túnel. El delantero cántabro lo ha pasado mal en las últimas semanas al no encontrar respuestas a su mal estado físico, pero el gol que logró en Vigo en el último minuto parece que le ayudará a superar el bache. Al menos, eso piensa el propio Bermejo: «Estoy muy contento ya que el gol dio un empate importante al equipo. Este año mis goles no estaban sirviendo para nada, salvo en la Copa que sí que tuvieron valor. En cambio, este tanto vale para sumar un punto ante un rival importante y además también me sirve para reforzar mucho la confianza en estos momentos malos. Además, me quedo con las buenas sensaciones que tuve durante todo el partido».

Es cierto que Bermejo ha puesto de su parte, pero el cántabro también le tiene que dar las gracias a un Javi López que nunca perdió la esperanza en recuperarlo. «Siempre se agradece la confianza del entrenador. Tanto en los buenos como, sobre todo, en los malos momentos. En los buenos momentos la confianza la tiene todo el mundo, pero cuando estas mal se agradece mucho más que el entrenador te ayude a recuperar tu mejor ritmo. Indudablemente, si me hubiera tocado vivir de otra manera el partido contra el Celta lo habría tratado de llevar de la mejor manera y sin embargo me dio la oportunidad de jugar otra vez. Durante los 90 minutos me encontré físicamente muy bien después de la lesión larga que me ha impedido ponerme bien. Espero que esto valga para recuperar la confianza y para que físicamente pueda continuar cogiendo ritmo». Y es que a diferencia de la semana pasada, ante el Celta se comenzaron a ver algunos destellos del mejor Bermejo: «La verdad es que ante el Rayo todo fue distinto. Quizás corrimos mucho sin balón y el campo estaba muy pesado. Después de llevarme dos meses sin jugar un encuentro entero el esfuerzo fue mucho mayor, todavía tenía un poco de miedo con la lesión del soleo y sobre todo fue la segunda parte en la que sufrí. En la primera me encontré bastante bien, pero luego me costó más aguantar el ritmo. En cambio, ante el Celta hasta el último minuto me encontré muy bien. El campo estaba perfectamente, disfruté mucho porque tuve fuerzas para trabajar, hacer desmarques, presionar, pelear... Al final, todo esto es lo que más me tranquiliza, que me encontré muy bien. Encima, el gol me da ese puntito de confianza que a lo mejor no tenía hasta ahora».

Y es que las últimas semanas de Mario no han sido fáciles, pues le costaba encontrar sus buenas sensaciones: «Uno siempre quiere estar al mejor nivel, físicamente muy bien y meter muchos goles. Indudablemente, uno tiene su familia y trata de desconectar para que no te afecte en tu vida personal, pero no cabe duda que empiezas a hacerte preguntas: '¿Qué me pasará?', '¿Por qué me lesiono?', '¿Por qué me cuesta coger el ritmo?', ¿Por qué no marco goles?'. Uno le da vueltas y quizás no hay que darle tantas. Hay que seguir trabajando y esforzándose. En ese sentido no he bajado nunca la guardia y no he cambiado mi forma de trabajar. Poco a poco quiero encontrarme y llegar al nivel que todos esperamos. El primero yo». Por ello, Bermejo desea que el gol en Balaídos sirva de «punto de inflexión. Yo soy el más interesado en estar perfectamente. Soy el que más lo desea, y más que nadie. Más que la afición, más que el entrenador, más que mis compañeros... yo soy el que más se beneficiará si estoy bien».