Las cámaras de comercio auguran problemas para las pymes por su nuevo modelo de financiación
El Gobierno aprueba un decreto por el que las cuotas para estas instituciones pasan a ser voluntarias y no obligatorias
MADRID. Actualizado: GuardarEl pleno de las cámaras de comercio criticó de forma muy dura ayer martes el cambio en su modelo de financiación decidido por el Gobierno mediante decreto ley, y que anula las cuotas camerales obligatorias para convertirlas en voluntarias. Un paso que, dicen las cámaras, no hará sino complicar el futuro de las pequeñas y medianas empresas. La protesta llegó el mismo día en que la Federación de Servicios de UGT (FeS-UGT) y Comfía-CC OO iniciaban una serie de movilizaciones en defensa del empleo de las 3.500 personas que trabajan en las 88 cámaras de comercio repartidas por todo el país.
La institución recordó que el Ejecutivo ha convertido en papel mojado su antiguo sistema de financiación sin siquiera consultar con las cámaras , «poniendo así en peligro la prestación de servicios básicos para la mejora de la competitividad de las pymes». Un método de captación de ingresos que, añadió el pleno, existe en muchos otros países europeos (Alemania, Francia, Italia, Holanda o Austria, entre otros) y cuya legalidad ha sido «sistemáticamente refrendada» por resoluciones judiciales de todo ámbito; desde el Tribunal Constitucional Español hasta el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
El procedimiento anulado «era un ejemplo de transparencia en la obtención y asignación de ingresos, a diferencia de lo que ocurre en muchas asociaciones privadas, que obtienen buena parte de sus recursos de ayudas públicas y subvenciones que no son conocidas por la mayoría de la sociedad», apuntaron las cámaras.
Futuro incierto
Con 125 años de historia, las cámaras de comercio ven ahora tambalearse su futuro, y advierten de que «la reducción de costes que supone para las empresas la medida adoptada por el Gobierno es insignificante si se compara con el daño que a medio y largo plazo puede generar». A su juicio, esa vuelta de tuerca, que obligará a muchas cámaras a revisar plantillas y gastos, hará que las empresas vean frenado su acceso a medidas de apoyo a la internacionalización, la formación, la innovación o el uso de nuevas tecnologías.
El pleno explica también que los emprendedores que aspiren a crear una empresa lo tendrán ahora mucho más difícil. «No existe en España otra institución capaz de ofrecer estos servicios a todas las empresas, que tan necesarios resultan para el cambio de modelo productivo que requiere nuestra economía», concluyen las cámaras .