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El PP subraya que la banda «ni pide perdón ni se disuelve»
Cospedal resta importancia al último texto de ETA porque solo es «una pausa» en su actividad criminal y pide al Gobierno que no caiga en viejos errores
MADRID. Actualizado: GuardarAño nuevo, comunicado viejo. Así definen los dirigentes del PP la última nota oficial de ETA. María Dolores de Cospedal evidenció ayer que los populares restan importancia al texto hecho público por la banda terrorista porque, a su juicio, lo único que «vale» a estas alturas es que la banda terrorista «deje las armas, anuncie su disolución y pida perdón a las víctimas».
El PP teme que el Gobierno pueda «caer» en una nueva trampa y «relajar» la presión sobre la izquierda 'abertzale' tras este comunicado y permita que «Batasuna, ETA o cualquier formación filoterrorista» se presente a las elecciones municipales del próximo mayo. La secretaria general del PP, aunque reconocen que «un solo día sin asesinatos, sin una extorsión o si un acto criminal» es un buen día, lanzó la clara advertencia de que se mantendrán «vigilantes» para intentar impedir con todos los medios a su alcance que ETA o cualquier 'marca blanca' de la banda logre representación en los ayuntamientos vascos. Es más, pidió a las Fuerzas de Seguridad del Estado, los jueces, los fiscales y los funcionarios de instituciones penitenciarias «cumplan» como hasta ahora su función en la lucha contra ETA. «Seremos tan constructivos como exigentes en nuestro apoyo al Gobierno en la lucha contra ETA», remachó.
Cospedal, para escenificar que rebajan la trascendencia del nuevo paso de ETA, abordó cuatro cuestiones previas al comunicado durante su intervención tras el Comité Ejecutivo Nacional que el PP celebró ayer. Y cuando abordó el tema lo hizo para leer de manera íntegra la declaración que Mariano Rajoy efectuó el 22 de marzo de 2006 tras el anuncio de la malograda tregua de ETA.
La número dos del PP destacó que aquellas palabras «tienen plena vigencia hoy» y recordó que todo lo sucedido desde entonces hasta ahora refrenda la idea de los populares de que el fin de ETA solo llegará mediante la acción del Estado de Derecho y la cooperación internacional. Cospedal, parafraseando lo dicho por Rajoy hace casi cinco años, incidió en que este alto el fuego que ahora se nos anuncia «es una pausa, no es una renuncia a la actividad criminal». Supone, a juicio de los populares, reafirmar la voluntad de la banda terrorista de seguir existiendo, «no se arrepiente de nada y no pide perdón a las víctimas».
Lo que también enerva a los populares es que ETA, de nuevo, «nos dice que el objetivo es iniciar un proceso que conduzca al objetivo de siempre, que es el derecho de autodeterminación y, de nuevo, nos impone las condiciones de siempre».
El Partido Popular tampoco tolerará la intervención de «mediadores internacionales» en un proceso en el que solo vale «la disolución» de ETA. O, como concretó ayer Cospedal, el único comunicado que tenía transmitir la organización terrorista ETA al conjunto de la sociedad española «era el anuncio de su disolución y el fin de sus actividades criminales y esto no se ha producido». Un argumento que tanto Rajoy como el PP lleva defendiendo desde hace muchos años.
Cospedal desveló que Alfredo Pérez Rubalcaba telefoneó ayer por la mañana a Federico Trillo, coordinador de Justicia del PP, pero negó que Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero hayan hablado de este asunto. Adelantó que no solicitarán la convocatoria del Pacto Antiterrorista hasta conocer qué importancia daba el Gobierno al texto de ETA.