El peso de la agricultura española en la Unión Europea sigue en niveles de 2005

El campo lucha por salir del agujero al que lo ha arrojado la crisis. Tras dos años de caídas en picado, la renta de los agricultores españoles volvió a mejorar en 2010, pero esa subida de ingresos fue solo la mitad de la experimentada por sus colegas europeos. La renta agraria por trabajador a tiempo completo subió en España en el último año un 6,5% respecto de 2009, frente al 12,3% de media de avance en la UE. Pese al tímido repunte, el peso del sector agrícola español dentro de la UE sigue en niveles de 2005.

La primera estimación realizada por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) de la renta agraria de 2010 en términos corrientes es de 22.547,5 millones de euros, un 5,1% más que el año anterior. Pero si se tiene en cuenta que el volumen de actividad expresado en unidades de trabajo año (UTA, equivalente al trabajo realizado por una persona a tiempo completo en un ejercicio) descendió un 1,3%, los ingresos por trabajador subieron un 6,5% interanual, hasta 25.128,5 euros. Esa cantidad supera los 23.593,4 euros de 2009, pero está muy por debajo de los 26.196,2 euros de 2007, el mejor año de la década.

Preocupadas por el tiempo perdido, las organizaciones agrícolas denuncian la «situación crítica» que padece el sector. El crecimiento anual del 6,5% en los ingresos de los campesinos y ganaderos españoles contrasta con el experimentado en países como Dinamarca (58,4%), Irlanda (39,1%), Francia (31,4%), Alemania (22,8%) o Polonia (18,4%). Dieciocho de los veintisiete países de la UE superan a España en crecimiento de la renta agraria, entre ellos Eslovenia, Portugal y las repúblicas bálticas que formaron parte de la antigua URSS. Solo facturaron menos que los españoles sus colegas de Eslovaquia, Chequia, Chipre, Finlandia, Italia, Grecia, Rumania y Reino Unido.

Tras leer esos datos, la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) denuncia que los productores españoles sufren reiteradas pérdidas de renta por las caídas de los precios en origen y por los aumentos de costes de producción. Una dinámica que, denuncian, «pone en cuestión cada vez más la viabilidad de las explotaciones». La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) considera que en 2010 los trabajadores del campo «han sido utilizados como mano de obra barata por la industria y la distribución».

Aumento de precios

Los cálculos del Gobierno, corroborados por la oficina estadística europea Eurostat, constatan que el valor de la producción agraria total a precios básicos aumentó un 1,9% en 2010. La producción vegetal avanzó un 4,6%, mientras que la animal descendió un 2,8%.

El crecimiento de la producción vegetal estuvo motivado por un aumento de los precios. Destacaron las subidas de los cereales (11,8%), patatas (51,8%), frutas (8,1%) y hortalizas (3,6%). Comportamiento opuesto tuvieron las plantas forrajeras, que se abarataron un 15,6%; el aceite de oliva, cuyo precio cayó un 6,3%; las plantas industriales y el vino mosto, que se rebajaron un 5,4% y un 4,5%, respectivamente. En términos de cantidad, destacaron los aumentos de producción de aceite de oliva (32,6%), plantas industriales (13,3%), plantas forrajeras (10,5%) y cereales (8,9%). Por el contrario, descendió la producción de frutas (5,8%), hortícolas (4,3%) y vino mosto (2%).

La producción animal disminuyó en valor un 2,8%. Las cantidades producidas muestran, por el contrario, un ligero ascenso global del 0,4%. Las mayores subidas en cantidad fueron para el equino (9,8%), aves (3%) y porcino (0,2%). Los descensos fueron para el bovino (1,7%) y el ovino-caprino (0,3%). Los precios mostraron un comportamiento opuesto, con una bajada del 3,2% que afectó a todas las categorías salvo el porcino.

Ayudas

El cómputo global señala un aumento de las subvenciones a las actividades agrícolas del 0,1%, hasta los 6.851,9 millones de euros, cantidad que incluye 668,4 millones en ayudas a los productos y 6.183,6 millones de «otras subvenciones». En conjunto, estos incentivos constituyeron el 30,38% del total de la renta agraria de 2010 medida en términos corrientes. El Gobierno estima que en 2010 los consumos intermedios del sector descendieron un 2% en cantidad, aunque en precio subieron un 4,9%. En volumen, los fertilizantes crecieron el 18,6%, mientras los servicios de intermediación financiera retrocedieron el 4,2%. Entre los mayores aumentos de precios figuran la energía y lubricantes, con un alza del 17,9%. Los fertilizantes se abarataron el 15,2%.