Caamaño asegura que la reforma solo beneficiará a los «trapicheantes»
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl ministro de Justicia, Francisco Caamaño defendió ayer las consecuencias, en cuanto a las excarcelaciones, que trae consigo el nuevo Código Penal. Aseguró que se rebajarán las penas a personas que se dedican a «trapichear» con la droga - «los trapicheantes» como los definió ayer- y no a las grandes organizaciones de narcotraficantes que tendrán penas más «severas». De esta manera, el ministro trataba de quitar hierro a una cuestión que ha generado bastante alarma, teniendo en cuenta las centenares de excarcelaciones que se van a producir en las próximas semanas.
De esta manera, el ministro ha recalcado que la reforma, con arreglo a lo exigido por la Sala Segunda del Tribunal Supremo y a las penas que existen en otros países, se adapta a la proporcionalidad y a la corrección debido a que existen algunos supuestos en los que hablar de narcotráfico tiene unas connotaciones «muy especiales».
«¿Alguien puede considerar que es proporcionado llamar así a una mujer que va a visitar a la cárcel a su hijo drogadicto y que le pasa una cantidad de droga valorada en 72 euros y que por ello es condenada a nueve años de prisión?», ha cuestionado Caamaño en una entrevista que concedió ayer a la Cadena Ser para insistir en que estas modificaciones «no suponen ni excarcelaciones ni revisiones masivas de condenas».
Sobre la no inclusión de la cadena perpetua, motivo por el cual el PP se abstuvo en la votación de la Ley, se debe a que el artículo 25 de Constitución no lo permite. «No nos gustan ni los corredores de la muerte ni los corredores en los que se agota la vida. Creemos que siempre tiene que haber una posibilidad».