La izquierda mantiene el castigo al Gobierno
Los grupos progresistas acusan al presidente de entregar a los mercados financieros el Estado de Bienestar
MADRID. Actualizado: GuardarLas fuerzas parlamentarias de la izquierda no perdonan. José Luis Rodríguez Zapatero volvió a recibir ayer un severo reproche de formaciones como Esquerra Republicana, Izquierda Unida, Iniciativa per Catalunya o el Bloque Nacionalista Galego por su política económica. Molestos por el hecho de que aprovechara su estancia en Bruselas, en el Consejo Europeo, para ratificar que elevará hasta los 67 años la edad de jubilación, le acusaron de dar la espalda a los postulados progresistas.
«Nadie niega que haya que reformar el sistema de pensiones para garantizar su estabilidad futura -admitió el portavoz de ERC, Joan Ridao-, pero es evidente que ustedes corren demasiado y, sospechosamente acuciados por los mercados y por la OCDE, han decidido comprometer la joya más preciada de nuestro Estado de Bienestar, que es la garantía de la cohesión social».
El diputado independentista fue uno de los oradores más críticos con la gestión del Gobierno. Pero no solo por la reforma de las pensiones. Su crítica fue más global. Echó en cara al presidente del Gobierno que haya asumido sin chistar las recetas de la derecha política y económica también en la reforma del mercado laboral y en los recortes del gasto social. «El actual modelo de globalización financiera quiere erosionar el Estado de Bienestar -insistió- y casi como el único exponente de la socialdemocracia que queda en Europa en estos momentos su objetivo debe ser no contribuir a su erosión».
A este argumento se sumó también la portavoz de IU-Iniciativa per Catalunya, Núria Buenaventura, y el del BNG, Francisco Jonquera, quien exigió que se plante cara a una «dinámica perversa» que, según su criterio, conducirá al desmantelamiento del estado social. «La única manera de calmar a los mercados es imponiendo el control de los poderes públicos sobre los mismos», arguyó.
Zapatero negó la mayor. Admitió que ha habido recortes, pero defendió que han sido muy «limitados» y que, en todo caso, preservan los dos principales pilares del Estado de Bienestar, la educación y la sanidad. Además pidió que se mire hacia aquellos países que se consideran modelos sociales como Alemania y Suecia. Ambos, dijo, llevaron a cabo duras reformas para preservar su sistema -tres años de congelación de las pensiones en el caso alemán- y en ambos casos, recordó, los recortes fueron gestionados por ejecutivos socialdemócratas.