La explosión de un oleoducto en México deja un reguero de cadáveres
Las autoridades creen que la tragedia, que causó 22 muertos y 32 heridos, se produjo al intentar extraer crudo de forma clandestina
CIUDAD DE MÉXICO. Actualizado: GuardarLa explosión de un oleoducto de la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) dejó ayer un reguero de muertos además de cuantiosos daños materiales, informaron fuentes estatales de Gobernación. Además, 5.000 personas fueron evacuadas de la zona y alojadas en un polideportivo para ser atendidas por las autoridades sanitarias. Aunque en un principio se habló de doce muertes, los trabajos de rescate elevaron la cifra a veintidós, según las autoridades, mientras que añadieron que el número de heridos es de 32, dos de ellos en estado grave.
La explosión ocurrió de madrugada en San Martín Texmelucan, en Puebla y según la coordinadora general del Sistema Nacional de Protección Civil, Laura Gurza, pudo deberse a un intento de extraer combustible de forma clandestina, práctica común en la zona, tanto por parte de particulares como del crimen organizado.
Casas destruidas
El estallido provocó la destrucción de las viviendas aledañas. Las autoridades de Protección Civil se desplazaron de inmediato a la zona para supervisar la recuperación de cadáveres y la extinción de los focos de riesgo derivados del incendio provocado por la explosión.
El Ejército activó el Plan DN-III, como procede en casos de desastres, y se encuentra desplegado en el lugar del siniestro, que incluye la evacuación de la población de la zona. El coordinador del operativo por parte del estado de Puebla, Germán García, instó a la población a no acercarse al lugar y dejar libres las carreteras cercanas para facilitar la actuación de las fuerzas de seguridad, bomberos y médicos.
San Martín Texmelucan está situado en los límites del estado de Puebla con el de Tlaxcala, ambos próximos al Distrito Federal. En sus alrededores se localizan dos grandes volcanes, el activo Popocatépetl y el apagado Iztaccíhuatl.