Zapatero y compañía: ¿socialistas o liberales?

No hubo banquete en la reunión de Zapatero con los empresarios; todo lo más, café y agua. Una invitación austera justificada: la crisis es para todos. El tema a tratar no es baladí, no se trataba de Eros (amor) como en el banquete de Platón, aquí la filosofía a dialogar es la diosa fortuna, siempre en mentes y manos inadecuadas.

Parece que la reunión ha surtido efecto inmediato. Los capitalistas siguen ocupando cotas de poder y Zapatero se ve obligado a mostrar su cara más liberal, buscando fórmulas antisociales y para ello se ha servido de un ugetista camuflado que aboga más por las políticas represivas de los liberales que de su propia ideología de proletario. A Rajoy lo trae loco, está desorientado; Zapatero lo ha dejado sin argumentos le ha robado todas sus ideas políticas.

Zapatero es como su perfil físico, un hombre con una personalidad algo confusa por su falta de expresividad, nunca se sabe cuando está cabreado o contento ni cuando está triste o alegre. Creo que tampoco sabremos si es de izquierda o de derechas si es socialista o liberal; yo pienso que ni el mismo lo sabe. Lo que sí tengo que reconocer es que es un buen orador, inteligente y muy persuasivo, un Protágoras moderno, capaz como decía éste, de hacer del argumento mas débil el más fuerte. Y yo me pregunto dónde está el argumento más fuerte y justo y dónde está el más débil, egoísta e insolidario. Zapatero se ha posicionado en el argumento más débil (capitalista) haciéndolo el más fuerte. Zapatero, eres un buen sofista pero un mal compañero porque no defiendes la verdad social, ni la igualdad real.