«Nunca tomaría el té con Sarah Palin»

La arruga es 'diez'. O eso parece pensar Bo Derek, que a sus 54 años no se ha retocado el rostro. Algo increíble en una 'sex symbol' californiana. La actriz ha amadrinado en Madrid una subasta benéfica de Moët & Chandon y está chispeante porque acaba de pasar un cumpleaños de ensueño.

-Cuente, cuente...

-Yo venía de la India, de la inauguración del hotel de lujo de un amigo mío, y me llevaron al Chateau Saran, la 'Maison Moët', en plena campiña francesa...

-¿Su vida es siempre así de fantástica?

-Normalmente vivo en mi rancho, donde no tengo ayuda y cocino, alimento a mis caballos...

-Creo que incluso ayuda en el parto a sus yeguas.

-Sí, me encanta. Pero de vez en cuando a todos nos gusta irnos al extremo opuesto y disfrutar del lujo. ¿Recuerda el concurso 'Reina por un día'? Así me siento yo muchas veces.

-Con y sin champán...

-Bueno, je, je, el champán ayuda. Hace todo un poquito mejor. Pero en mi vida hay algo tal vez inusual. Y es que yo siempre he disfrutado. Mucha gente trabaja y trabaja para luego jubilarse y gozar. Yo en cambio he intentado gozar siempre.

-El dinero de la subasta irá a la Casa del Actor. ¿Es dura la jubilación para una 'sex symbol'?

-Para algunos es muy difícil dejar de actuar. Su trabajo es su pasión, su oxígeno. Para mí nunca ha sido eso. Fue un regalo, algo muy importante en mi vida. Pero yo nunca necesité a Hollywood. Lo aprecio y lo respeto. Pero eso no es lo que soy.

-La 'Mujer 10'... Qué presión ¿no?

-Mire, hace doscientos años yo habría sido una flacucha sin ningún atractivo y me habrían mandado a ordeñar vacas. Todo es relativo. Me parezco a mis padres, no me he retocado la cara... Simplemente, nací así.

-¿No le tienta el botox, un lifting...?

-Quizá algún día. Pero veo a jóvenes guapísimas que pasan por el cirujano para cambiarse a sí mismas. Con sólo treinta años. ¡Es tan triste! Lo que ganas con la cirugía para una portada lo pierdes en expresividad a la hora de cenar con tus amigos.

-¿Ahora es mucho más que diez?

-¡No mi piel desde luego, ja, ja, ja...! Ojalá tuviera hoy este cerebro y aquella piel. Con la edad llega la sabiduría, la seguridad, el confort con una misma. Y yo no soy de perder el tiempo contemplando mi interior. Hay tanto que hacer...

-¿Todavía añora a su desaparecido marido, John Derek?

-Bueno, desde hace ocho años estoy con el actor John Corbett. Es completamente diferente a mi marido y yo estoy loca por él. Pero es que también yo soy diferente. Mi marido era tan complicado, tan intenso... Con éste en cambio todo es diversión y felicidad.

-No tiene hijos. ¿Se arrepiente?

-No. Si mi vida se hubiera ralentizado habría sido un buen momento para tener niños. Pero eso nunca ocurrió y yo no podía hacer las dos cosas.

-Angelina Jolie y Brad Pitt parece que pueden.

-Poseen una energía y una concentración que yo nunca tuve.

-En su día apoyó a Bush... ¿Qué opina de Barack Obama?

-Soy muy pro-Obama. Sí, sí, soy independiente. Y quisiera que todos lo apoyáramos más.

-¿Le gusta el Tea Party?

-No. A los políticos los quiero fuera de mi vida privada. Detesto que la moral intervenga en la política.

-Así que no compartiría un té con Sarah Palin...

-Jamás. Delo por hecho.

-¿Ycon Arnold Schwarzenegger?

-Adoro a mi gobernador. Sólo le conozco de hola y adiós. Pero hace dos años me pidió que dirigiera una comisión de cría de caballos, que es un gran negocio en California. Y ahora soy la señora comisionada. La gente miente. Los caballos no.

-¿Sigue luchando contra el cliché de guapa, rubia, tonta...?

-Todavía. Pero creo que me beneficia, porque parto de unas expectativas tan bajas que sólo puedo superarlas.

-¿No piensa hacer más películas?

-A esta edad debo ser muy cuidadosa. He hecho ya tantas malas que es mejor esperar a alguna buena.