Pilar Sánchez y María del Carmen Martínez presentaron en la casa Ford la reciente adquisición municipal. :: LA VOZ
Jerez

Cuatro coches que se quedan cortos

Desde el SIP critican que se trata solo de «parches» y aseguran que hacen falta al menos una docena de patrullas más La alcaldesa presentó ayer nuevos vehículos para la flota de la Policía Local

JEREZ. Actualizado: Guardar
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La alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, acompañada de la delegada de Movilidad y Seguridad, María del Carmen Martínez, presentó ayer a bombo y platillo los cuatro nuevos coches patrulla que ya se han incorporado a la flota de vehículos de la Policía Local. Una adquisición que llega como agua de mayo, como recordó la propia edil, y para la que el Ayuntamiento ha invertido una partida de 100.000 euros. Estos turismos de la marca Ford se unen a los cuatro Seat Altea que se compraron el pasado año, junto con una decena de motocicletas.

Sánchez adelantó, además, que los Presupuestos Municipales de 2011 contemplarán la incorporación de otras seis motos, junto a nuevas emisoras y al tan demandado repetidor para la zona sur. Todo un paquete de recursos con los que el Consistorio quiere contribuir a mejorar las condiciones en las que trabajan los agentes y, por ende, a la calidad asistencial que se presta a los ciudadanos.

A pesar de todo este despliegue, el Sindicato Independiente de la Policía Local sigue sin estar satisfecho. Como declararon ayer fuentes del SIP, se trata de «parches» que en nada solucionan el grave problema de fondo que supone la falta de recursos materiales del Cuerpo. «No hay que olvidar que de los cuatro del año pasado dos están en el taller y no se van a arreglar porque no hay dinero, con lo que está claro que seis vehículos son insuficientes para una plantilla de 300 trabajadores».

Lo ideal, según los agentes, sería que cada turno dispusiera de al menos seis coches, lo que implica un montante total de 18. «El furgón está que se cae a pedazos -insistieron- y ahora mismo las motos que hay son ocho que están viejas, la más nueva tiene 14 ó 15 años, porque las que nos dieron el año pasado se las llevaron a las pedanías». Ante esta perspectiva, se muestran escépticos y piden una mayor inversión y que las promesas no queden en agua de borrajas.