Las previsiones meteorológicas restan tirón a un puente «demasiado largo»
La zona de Grazalema rozará el 80% de ocupación y las reservas se realizan para dos o tres noches y no para todos los días festivos
GRAZALEMA. Actualizado: Guardar«Demasiados días de fiesta para el poco dinero que tiene la gente». Esa es la sensación que ayer transmitían la mayoría de hosteleros y hoteleros serranos preguntados por LA VOZ con respecto a las previsiones que manejan para uno de sus particulares agostos turísticos: el Puente de la Inmaculada.
Aunque este año la mayoría observa una pequeña subida con respecto al año anterior, todos coinciden en que gaditanos y sevillanos, que son los que suelen acudir a la Sierra estos días «están repartiendo los días de descanso y prácticamente nadie reserva para todos los días del puente», destaca Juan Carlos Vega, gerente de Turismo Gaditano S.A (Tugasa).
Los hoteles de la empresa turística de Diputación contarán con un 70% de ocupación en el primer año en el que no cuentan con la que fuera la joya de su corona, la Villa Turística de Grazalema. Esto está generando que los clientes fieles de Tugasa se trasladen a otros hoteles como los de El Bosque, Villaluenga y Zahara, reconoce Vega.
A pesar de la importancia que el puente de La Inmaculada tiene para la Sierra, la comarca sólo recibe ahora a «visitantes de uno o pocos días que vienen, generalmente, de nuestra provincia», destaca la presidenta de la Asociación de Turismo Rural de la Sierra, Olga Galván. Ella considera que la temporada alta para la comarca se lleva a cabo entre marzo y mayo, momento en el que alemanes, ingleses y franceses vienen a la Sierra para disfrutar de sus encantos.
Los hoteleros destacan que en los últimos años se está perdiendo la costumbre de reservar las plazas hoteleras e incluso las casas rurales con mucha antelación, por lo que los esperan que «el tirón de última hora nos permita disfrutar de un lleno absoluto», asegura Galván.
Grazalema y su entorno volverán a ser estos días el centro turístico de la provincia, ya que en otras zonas serranas como Arcos la ocupación será mucho menor que en la zona más montañosa. La alcaldesa de Grazalema, María José Lara, reconoce que la ocupación en el municipio va a ser «muy irregular por culpa de las previsiones meteorológicas», pero destaca la importancia del pequeño municipio serrano para seguir a la cabeza del desarrollo turístico de la Sierra.