El Cádiz, obligado a ganar en el regreso de Jose González al Carranza

Sin duda que no será hoy el día de la reconciliación definitiva del Cádiz con su afición pero sí que de lo que suceda esta tarde en Carranza dependerá mucho que ésta llegue pronto o no. Ni el tiempo, en pleno temporal, ni el rival, el Jumilla, hacen del partido de hoy una oportunidad de oro para que el equipo amarillo firme la paz con su parroquia, a la que le debe todo lo que no le dio con Risto Vidakovic. Pero los de Jose están obligados a sacar una pequeña sonrisa a todo aquel cadista que se pase a eso de las cinco de la tarde por la plaza de Madrid. Ante el Lorca, apenas fueron unos 3.000 los valientes que fueron a observar a los de Vidakovic, esta tarde se esperan algo más pero ni de lejos para alcanzar el objetivo con el que ha llegado Jose al banquillo cadista: llenar el estadio.

De hecho, y gracias a que todavía está muy lejos de llegar a ese sueño, el técnico gaditano podrá elegir entre la cantidad de asientos libres que quedan por la preferencia baja para sentarse a ras de césped y seguir desde ahí las evoluciones de sus chicos por segunda jornada consecutiva. La falta de acuerdo definitivo con Risto Vidakovic (se espera a que la ficha se curse definitivamente esta semana entrante) ha vuelto a impedir que el entrenador cadista se siente en el banquillo del Cádiz como ya le pasó hace siete días.

Será desde ahí desde donde Jose aplicará las tuercas de un equipo que anda cargado de agujetas desde su llegada. La intensidad y la agresividad que ha entrado en el vestuario cadista desde la llegada de Jose no solo se ha notado en el campo sino también en la lista de lesionados, en la que ha entrado Raúl López y Germán, el primero por dos fisuras en sus costillas tras entrar con fuerza a un compañero y el segundo por una elongación en su abductor. El caso es que el trabajo se ha duplicado al mismo tiempo que se ha endurecido. Y claro, los jugadores lo han notado. A estas ausencias por lesión, el Cádiz se tendrá que reponer a las bajas por sanción de Moke, Aarón Bueno y Velasco, los dos últimos expulsados la pasada jornada.

Así pues, y con lo que tiene sobre la mesa, Jose no tendrá más remedio que confiar en lo que tiene para doblegar a un Jumilla al que por solo por el nombre se le tiene que pasar por encima. Y mucho más si Carranza es el escenario. Y como eso mismo lo sabe y lo asume Jose, y por mucho que solo lleve apenas una semana y media en el cargo, el técnico tiene que salir decidido al ataque y sin ningún ramalazo conservador. «En casa estamos obligados a ser los dominadores de los partidos», dijo el viernes. Y en esa línea Jose alineará un once netamente ofensivo aunque con los bases bien sujetas con una defensa renovada a la que compareció en Caravaca. Así, Campos ordenará desde atrás a una zaga formada por Cifu (que manda a Pecci al filial), Álvaro Silva (que retrocede su posición), Baquero y Diego Reyes (que suple al lesionado Raúl López). La contención en el centro del campo será misión de Álvaro Jurado (que vuelve tras su sanción) y la creación se le confiará al canterano Josemi Caballero. Las bandas serán para Enrique (la derecha) y López Silva (que sustituye a Aarón), la media punta será para Carlos Caballero y arriba estará Pachón. Un once de urgencia que, si se gusta hoy, puede ganar crédito y, con él, continuidad.