ESTAMOS CONTENTOS

Estamos contentos (alegría moderada). Por fin el Cádiz volvió a ganar fuera de casa, cortando esa racha de tres derrotas consecutivas y mostrando un carácter más sólido y equilibrado. Estamos contentos por los tres puntos de Caravaca, porque aún queda tiempo para pelear incluso por el primer puesto, o al menos luchar al final de temporada por un hueco en la liga de fútbol profesional.

Estamos contentos. Jose González ha recuperado la estrategia y la puerta cerrada ahora oculta un ensayo metódico de las acciones a balón parado, «no como antes», citando a algún futbolista de la actual plantilla que sin duda prefiere guardar el anonimato.

Ha venido un entrenador con experiencia, que ya sabe lo que es ascender, que cuenta con varias temporadas de trabajo a sus espaldas e incluso paseos por los coliseos de Primera. Sí, estamos contentos. Porque además es de la casa, se entera de todo lo que pasa por aquí y es más difícil cogerle las vueltas. Es exigente, con él y con sus pupilos, y ahora el trabajo es más intenso y duradero. Toca sudar y correr lo que antes no se ha corrido. Seguro que por eso algunos no están tan contentos.

Por nuestra parte sí, Enrique, estamos contentos. En eso hemos de darte la razón. Pero no porque hayan despedido a un trabajador como puede ser Vidakovic, pues además su mal es el mismo del Cádiz, y el Cádiz somos todos. No hay crítica más dura que cinco derrotas en siete partidos, o el vacío de Carranza de hace dos domingos. No era para estar contento. Ahora un poco más. Pero sin duda estábamos más contentos hace algunos años, cuando se ascendió en Chapín o se dio la cara en el Bernabéu y el Camp Nou. Cuando en el estadio no había un hueco y muchos cadistas se quedaron sin abono porque no había sitio. Hace muy poquito. Ahí todos estábamos contentos. Tú también.