La UEFA estudia expedientar a Ramos y a Xabi

La UEFA podría expedientar a Xabi Alonso y Sergio Ramos por forzar la segunda amarilla de forma ostensible en el Ámsterdam Arena para no jugar contra el Auxerre y no verse amenazados de suspensión en los octavos de final de Liga de Campeones. Si abre una investigación, admitiría como válidas no solo el acta del partido sino también las imágenes de televisión.

Si considerase probado que hubo conducta antideportiva, algo que siempre resulta muy complicado, los futbolistas serían castigados con uno o dos partidos de sanción extras, tal y como le sucedió al portero azulgrana Pinto, al que cayeron dos encuentros por imitar el pitido arbitral para engañar a un contrincante. El vídeo es delator. Las cámaras captaron primero los cuchicheos entre Mourinho y Chendo, delegado del Madrid, en el banquillo. Después, Dudek, el portero reserva, se acercó a la portería de Casillas y le comentó el asunto. Luego, el guardameta de la selección se lo explicó al oído a Sergio Ramos, y el defensa se lo comunicó a Xabi Alonso. En el minuto 87, el medio demoró en exceso el lanzamiento de una falta y vio la segunda amarilla. Y en el tiempo añadido, el zaguero hizo lo mismo en un saque de puerta que habitualmente ejecuta el portero. Mourinho, Casillas y el resto de los jugadores negaron toda componenda al final del encuentro. «Las tarjetas no me han gustado, porque también queremos ganar al Auxerre», llegó a manifestar el preparador.

Esta artimaña es habitual en el fútbol de alto nivel, pero la reiteración, lo obvio de la maniobra y la dimensión del club implicado y de la competición han alimentado la polémica. La UEFA ha confirmado que el último precedente de acciones de este tipo aconteció en el 2008, cuando los jugadores del Olympique de Lyón Juninho Pernambucano y Cris buscaron la amarilla en un encuentro ante la Fiorentina. Entonces, la sanción fue solo económica, con una multa de 10.000 euros.