Economia

Arrecia la tormenta en los mercados de deuda de la zona euro por la crisis irlandesa

Bruselas dice estar preparada para el rescate de su socio europeo, pero el Gobierno de la isla descarta solicitarlo

MADRID. Actualizado: Guardar
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Arrecia la tormenta en los mercados europeos y se encarecen las primas de riesgo de los países periféricos. La Unión Europea dijo estar preparada para acudir al rescate de Irlanda «si fuera necesario», según admitió Jose Manuel Durao Barroso, presidente de la Comisión, en declaraciones realizadas desde Seúl en la cumbre del G-20, pero el Gobierno de Dublín descartó, muy digno, tal posibilidad, asegurando que ni había solicitado ni precisaba tal socorro de sus socios europeos.

No obstante este rechazo, los intereses de los bonos del Estado irlandeses y portugueses continuaron disparados ayer, y el recelo de los inversores contagió nuevamente a España, donde el diferencial de las obligaciones a diez años con el título germano del mismo plazo escaló en algún momento los 220 puntos básicos para estabilizarse en torno a los 218, y los seguros de cobertura contra el impago volvieron a marcar un nuevo máximo, cifrado en esta ocasión en 280 puntos.

El tipo de interés del bono de Irlánda se disparó durante la jornada de ayer hasta el 8,929%, alcanzando el nivel más alto desde que el país entró en el euro. En Portugal, la presión cedió ligeramente, para moverse en torno al 6,882%. Mientras que Alemania paga el 3% a los compradores de su bono de referencia, España tiene que abonar más del 5%. El país luso solo puede captar este tipo de fondos con una retribución cercana al 7% e Irlanda debe pagar más del 9%. Y ya van nueve días consecutivos de escalada.

Seis meses después del rescate de Grecia, la zona euro atraviesa de nuevo una zona de fuertes turbulencias. Los inversores temen que Irlanda, que ha tenido que pagar un elevado rescate de 50.000 millones de euros por sus seis principales bancos, no logre sacar adelante las cuentas públicas de 2011, las primeras de un severo programa cuatrienal de austeridad con el que pretende reducir un déficit equivalente nada menos que al 32% del Producto Interior Bruto hasta el 3% exigido por la disciplina comunitaria. Con una ajustada mayoría parlamentaria, el gobierno irlandés se enfrenta el 7 de diciembre a una dramática votación, y los expertos también ponen en cuestión el cumplimiento de un plan de ajuste tras las elecciones previstas para el año 2012.

El Gobierno irlandés, sin embargo, insistió en que el país «está en condiciones de pagar su deuda», y recordó que el próximo mes de enero volverá a emitir deuda pública, con lo que podrá reabastecer sus arcas.

Diferencias

España no es Irlanda, clamó desde Seúl la vicepresidenta económica y ministra de Economía Elena Salgado, quien aseguró que si el desencadenante fundamental de la actual inestabilidad es la situación financiera de la isla, no hay que olvidar la inquietud generada por la propuesta alemana de que el sector privado participe en una segunda fase en el procedimiento de rescate que se propone establecer la Unión Europea para el caso de que alguno de sus socios entre en crisis. De acuerdo con este mecanismo, si un país suspende pagos sus acreedores tendrían que soportar una quita, opción que ahuyenta a los inversores, incluso antes de que se apruebe.

Salgado ya expresó sus recelos ante esta propuesta, que no se decidirá hasta el mes de enero. Y su aplicación tampoco se produciría de inmediato, porque el actual mecanismo, el aplicado en el caso griego, está vigente hasta 2013.

Por añadidura Grecia, el primer país objeto de rescate, reconoció ayer que el déficit público podría superar este año el objetivo de 8,1% del PIB fijado por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio del plan trienal de apoyo 110.000 millones de euros acordado en mayo, que salvó a Atenas de la quiebra. El primer ministro, Yorgos Papandreu, matizó que la diferencia responde a la revisión al alza por la oficina europea de estadísticas Eurostat del déficit público griego en 2009, que se espera supere el 15%, una proporción superior al 13,6% hasta ahora estimado.