Un curso para el recuerdo

Alberto Moncayo cerrará este fin de semana su primera temporada en 125 cc. Situado en una honrosa decimocuarta posición, el piloto gaditano pone en el valenciano circuito Ricardo Tormo el broche a una inolvidable campaña, la de su estreno en la élite del motociclismo.

Cosechar 65 puntos en su primea toma de contacto con la alta competición es una cifra bastante esperanzadora para un piloto que ha dejado en un gran lugar el nombre de la provincia de Cádiz. Y es que, puntuar en once de las 17 pruebas del campeonato es todo un éxito para un debutante en la categoría.

En una clase con claro sabor español (Marc Márquez, Nico Terol y Pol Espargaró ocupan el podio en el octavo de litro), Moncayo ha sabido ganarse un hueco. Buena prueba de ello son sus grandes actuaciones en Jerez, donde logró cosechar diez puntos en su segunda carrera como piloto de 125 cc, o Estoril. Precisamente, fue ahí donde se disputó la penúltima prueba del campeonato y el gaditano también se hizo con una decena de puntos tras alcanzar la sexta posición, resultado que no terminó de agradar a un exigente Moncayo, que llegó a indicar tras la celebración del ran Premio de Portugal la semana pasada: «Este resultado es un poco frustrante, ya que he estado todo el fin de semana entre los cinco primeros».

Sea como fuere, el de la Tacita de Plata ya piensa en colocar la guinda en tierras valencianas. Superar los once puntos obtenidos en Motegi durante el GP de Japón será su misión y, de paso, escalar algunas que otra posición en la tabla (Salom y Folger están a tiro). Sería un magnífico broche para un curso para el recuerdo.