La Policía descarta que el robo esté detrás de la muerte del funcionario de San Fernando
La víctima y su presunto asesino se habían citado en la vivienda la misma mañana del suceso a través de Internet
SAN FERNANDO. Actualizado: GuardarLa Policía Nacional continúa atando cabos para que nada se les escape del macabro asesinato que ha conmocionado a San Fernando. Las pruebas que han conseguido reunir los agentes son bastantes sólidas y señalan al detenido como el presunto autor del crimen del funcionario municipal. La investigación está muy avanzada y ayer se produjeron nuevos registros tanto en el domicilio del empleado del Ayuntamiento como en el Hostal París (junto a la estación Centro de Renfe), donde se alojaba el joven de 24 años que sigue detenido en los calabozos de la Comisaría.
Al parecer el supuesto homicida llevaba varios días en la ciudad a la que llegó, desde Tarragona, con la intención de comenzar una nueva vida. Y para ello había elegido una localidad que ya conocía pues había trabajado años atrás como soldado profesional. Nada más llegar decidió comprarse una navaja para defenderse y, según fuentes de la investigación, es el mismo arma que utilizó para acabar con la vida de Manuel Pereira, de 46 años.
Internet fue el medio por el que víctima y supuesto asesino contactaron, la misma mañana en la que transcurrieron los hechos, para quedar por la tarde en la propia vivienda, que se convirtió en el siniestro escenario del crimen. Los agentes ya han descartado que el móvil fuera el robo pues no existen indicios que refuercen esta teoría y manejan otra tesis, que la agresión mortal está vinculada directamente con una posible relación entre ambos. Lo cierto es que la violencia empleada contra el fallecido, que recibió varias puñaladas, suele aparecer en los crímenes pasionales. Fuentes consultadas por este periódico confirmaron que en el interior de la casa del funcionario hallaron numerosos restos de sangre.
A Manuel, que la noche anterior se le vio con su pareja, no le dio tiempo a pedir auxilio, algo que sí hizo el presunto autor, alarmando a los vecinos que avisaron a la Policía. Mientras los agentes intentaban entrar por la puerta, el joven de 24 años trató de huir saltando desde un segundo piso, lleno de sangre y con el posible arma aún en la mano. El comisario provincial de Cádiz de Policía Nacional, José María Deira, quiso resaltar la «colaboración ciudadana» que permitió dar alcance a este individuo en una azotea de otro edificio y a medio camino de donde se alojaba. De hecho, sin esta ayuda hubiera sido muy complicado resolver el crimen ya que no hay ninguna relación entre el funcionario y el joven, más allá de sus contactos por Internet.
El detenido continúa arrestado en los calabozos de la Comisaría Nacional de San Fernando y previsiblemente no pasará a disposición de la autoridad judicial hasta mañana, agotando las 72 horas que la Ley establece para mantener en calidad de detenido a una persona.
El cuerpo del fallecido seguía ayer en el Instituto Anatómico Forense donde se le practicará la autopsia; mientras no se realice, la fecha del entierro sigue en el aire.