¿Quién dijo crisis?

«Oye, ¿qué pasa?, que todo Jerez se ha cogido hoy el día de asuntos propios?». Ésa era la gran pregunta que se lanzaban sorprendidos los que no habían querido madrugar y se acercaban al nuevo complejo comercial Luz Shopping pasadas las doce de la mañana. No en vano, lo primero que se encontraban al llegar era la explanada de los aparcamientos llena hasta la bandera, tiendas repletas de compradores y colas desmoralizadoras en las cajas para pagar los productos que prácticamente desaparecían de las estanterías.

Milagros y sus dos amigas, ambas llamadas Pilar, contaban ayer que habían venido temprano desde Puerto Real, sobre todo «para comprar los juguetes para los Reyes con tiempo, y ahorrarnos un dinerito». Pero se acabaron marchando de la enorme cola que había a las puertas de la juguetería del 'todo a 10 euros', como era conocida ayer la tienda MGI. «Es que hay gente para varias horas, y seguro que cuando nos toque a nosotras ya no hay nada bueno», decía una de ellas mientras sus compañeras asentían y apuntaban que «ya vendremos en otro momento, a una mejor hora cuando haya menos gente». Sí que aguantó en la fila Patricia Montero, de Paterna, que se enteró por la radio de las ofertas y que sabe que en Luz Shopping va a encontrar mejores precios que «en la única juguetería de mi pueblo». «Tengo nueve niños a los que regalar, así que echo números y no me salen», apuntaba ayer.

Sin duda, ese día no será el próximo lunes día de noviembre, que ya se postula como la primera gran prueba de fuego en cuanto a avalancha de clientes de Luz Shopping después de la inauguración de ayer. «Es festivo, pero las tiendas se van a abrir, y esto se va a poner imposible», apuntaban algunos responsables de establecimientos.

Claro que no parece que el hecho de que ayer miércoles fuera jornada laborable disuadiera a nadie de acercarse por los recién inaugurados establecimientos, e incluso de hacer cola durante toda la noche para ser premiado con algunas de las promociones de las distintas marcas. Hasta una anciana en silla de ruedas y tapada con las mantas rojas que regaló Worten durmió a la intemperie.

«Mucho paro es lo que hay, por eso está todo el mundo aquí de tiendas, paseándose», aventuraba ayer Julián Romero, un joven que se llevó los 100 euros de la marca antes mencionada, pero que confesaba haber hecho alguna trampa porque pasó varias horas «en el coche con la calefacción encendida». Sin embargo, su amigo David Montilla le replicaba que «no será para tanto, porque la gente saca las carteras y se está dejando un buen dinero en las cajas». Ellos dos, hasta la número 200 de la cola, Clotilde Sánchez, que venía por una televisión, fueron recibidos con un pasillo y sonoros aplausos por la plantilla de Worten. Uno de los dependientes, Javier Méndez, apuntó que «ojalá agotemos la mercancía, sería una buena señal».

En general, lo que más primaba ayer en Luz Shopping, además de las amas de casa y familias llenando carros de comida en Alcampo -«tienen unos precios baratísimos», decían-, eran jóvenes haciendo acopio de equipos informáticos y para el ocio, o parejas que están «montando la casa» y que se acercaron a los negocios de decoración y reformas para coger ideas, pedir presupuestos y poder comparar precios.

Es el caso de Álvaro Ferrer, que está reformando su casa y ayer encontró «muy buenas ofertas», o de Laura Peña, a la que esta semana le han dado el piso y que quiere hacer la ruta por Ikea y el resto de marcas, como Bricor.

Cada uno a lo suyo. Y mientras en el suelo iban quedando los folletos, algunos salían contentos y contando por el móvil que el microondas se lo llevan por nueve euros y todos, sin excepción, tiraban de tarjeta y llenaban los maleteros.