La alcaldesa no logra arrancar el compromiso de Sebastián para la ampliación del Parador
El ministro abre la carrera contrarreloj para acabar las obras del hotel Atlántico en 2012 pero adelanta que su anexo «no es una prioridad»
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl nuevo Parador de Cádiz ha iniciado su cuenta atrás hacia 2012 en un carrera contrarreloj. En sólo 16 meses debe levantarse junto al Parque Genovés un complejo hotelero de cinco estrellas que será la residencia oficial de las principales autoridades que visiten la provincia durante la celebración del Bicentenario. Todo un reto. El ministro de Industria, Comercio y Turismo, Miguel Sebastián, dio ayer el pistoletazo de salida a la obra con la colocación simbólica de su primera piedra y pidió tanto a la empresa adjudicataria, Acciona, como a los gestores del proyecto «todo lo posible y lo imposible para cumplir con los plazos».
La construcción del Parador forma parte de un ambicioso plan de reordenación de la zona, que incluye además la apertura de un edificio anexo, complementario al nuevo hotel. Son dos módulos frente al mar. Sin embargo, la ampliación del Parador ha topado con la crisis y la falta de recursos económicos de la Administración central para abordar su desarrollo de forma inmediata. La alcaldesa de la ciudad, Teófila Martínez, aprovechó ayer la presencia de Miguel Sebastián en el acto de la primera piedra para pedir un «empujón» a la obra del anexo. El titular de Industria recogió el guante y minutos después reconoció abiertamente que la ampliación del Parador sigue su camino en los despachos con la redacción técnica del proyecto pero «no es una obra prioritaria». Miguel Sebastián aclaró que la verdadera prioridad en estos momentos consiste en acabar el Parador en los primeros meses de 2012.
La ampliación del hotel Atlántico depende de la empresa pública Turespaña y ocupará el terreno del Campo de las Balas. El Ayuntamiento ya ha elaborado el anteproyecto y la alcaldesa explicó ayer que una inversión de esta envergadura no se puede aplazar por falta de dinero, al contrario, «hay que reactivarla ahora para que no se duerma en los despachos y sea una realidad en breve».
El presidente de Paradores de España, Miguel Martínez, dio ayer unas pinceladas sobre lo que ha sido la presencia de la marca Paradores en Cádiz durante los últimos 40 años y dijo, al respecto, que el duende la Bahía impregnó a un edificio emblemático y hará lo mismo con el nuevo que se construirá en poco más de un año. Martínez explicó que el viejo no se podía mantener por su aluminosois y tampoco ofrecía calidad. Ahora se ha proyectado un hotel de 30 millones de euros, con 124 habitaciones, de las que 17 serán suites y una tendrá la categoría de Presidencial. El complejo contará con una piscina elevada que ocupará 250 metros cuadrados, una piscina cubierta, terraza y solarium, además de un millar de metros cuadrados de salas para celebraciones y reuniones.
Valcárcel sigue en el aire
El presidente de Paradores defendió la apuesta del Gobierno de la Nación por Cádiz, sobre todo, en un momento en el que la mayor parte de los proyectos hoteleros previstos para 2012 «se han ido al traste», en clara alusión al hotel de cinco estrellas que se había proyectado en Valcárcel de la mano de la cadena Palafox y que, finalmente, sus inversores han tirado la toalla después de seis años de gestiones. Este periódico preguntó sobre la posibilidad de que Paradores retomara el proyecto que había abandonado Palafox en Valcárcel y la respuesta fue contundente: «la prioridad inmediata que nos ocupa ahora es la de levantar el Parador; no hay otra».
La colocación de la primera piedra del Parador reunió en el solar del antiguo hotel Atlántico a una nutrida representación de autoridades de la provincia, diputados, parlamentarios y senadores. Al acto acudió también una antigua clienta del hotel, Ana Fraga, que ocupó durante años la habitación 336 del viejo Parador. El ministro Miguel Sebastián hizo referencia a los datos turísticos y recordó que el verano de 2010 ha sido el primero de tres años con saldo positivo en cuanto a crecimiento. Los 19 millones de turistas que ha recibido el país han servido para crecer, por primera vez desde que estalló la crisis, un 4,2%.