«Vivimos con los inmigrantes sin tratarlos como tal»

«Las relaciones son muy buenas con ellos a diario, son verdaderamente fluidas», indica Brenes reconociendo que la clave no reside sino en «vivir, día a día, con los inmigrantes sin tratarlo como tal, sino como un vecino más». La cuestión, de apariencia tan sencilla es, sin embargo, un ejercicio de tal compromiso que, como asegura, «pretendemos contar con ellos y ayudarles en lo que necesiten de la asociación y al mismo tiempo invitarles a que se integren en ella de modo total». Insiste en que ello implica «incluso la posibilidad de que ellos lleguen a formar parte de su junta directiva». «Que ellos expongan sus necesidades y lo que quieren que se haga en el barrio», añade. Y entre todos los vecinos se generaliza la opinión de que «estos encuentros de corte multicultural permiten crear puentes y relaciones que, desde la relación personal, hace que podamos trabajar de modo conjunto por el bien de nuestra barriada». A partir de esta idea integradora nació esta iniciativa mantenida en el tiempo y con la firme vocación de que se siga organizando cada año.