Porta, en libertad
La justicia de Honduras retira los cargos al chipionero que permanecía retenido en este país desde hace un año
CHIPIONA. Actualizado: GuardarAntonio Porta ya puede regresar a casa. Un año después de que pusiera sus pies en Tegucigalpa, la justicia hondureña ha resuelto retirar los cargos que pesaban sobre el chipionero, por una participación en los disturbios del golpe de estado que, según él, nunca existió. Su madre, Josefa Porta, achacó la liberación al papel que habrían podido jugar la Reina y el Ministerio de Exteriores, a raíz de las cartas que ella misma les envió hace un mes. Ahora el gran dilema es con qué dinero pagará los billetes de avión.
Porque el chipionero no sólo tendrá que costear el suyo, sino también el de su esposa, María Antolina García, la hondureña de la que se enamoró a través e Internet y por la que no dudó en viajar a un país en plena crisis política. Dos días después de su aterrizaje en Tegucigalpa, se vio en medio de una trifulca frente a la embajada de Brasil, donde permanecía refugiado el presidente depuesto por el golpista Micheletti. Fue detenido y acusado de lanzar piedras contra un vehículo policial.
Un año más de espera
Un juicio rápido lo condenó a ocho años de prisión, pero tras un mes entre rejas, fue puesto en libertad con cargos. Una situación que le ha mantenido retenido en el país sudamericano hasta hace dos días, ya que tampoco se benefició de la amnistía decretada por el nuevo parlamento en enero. «Hace poco le dijeron que tendría un nuevo juicio, pero que habría que esperar un año más en el país. Yo me morí». Josefa Suárez, que ha mantenido un contacto permanente con su hijo, no dudó en enviar dos cartas a la Reina Doña Sofía y al ya ex Ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para que intercedieran por la liberación de Toni. «Sólo unos días después de eso le dijeron a mi hijo que el juicio sería inmediato. Se celebró el 23 de septiembre, y ha tenido que esperar casi un mes a que le digan el resultado. Ayer mismo (por el miércoles) me llamó para decirme que estaba en libertad».
Sicarios y conflictos
Esta buena noticia pone punto y final a la pesadilla en que se convirtió un viaje, en principio ilusionante, pero que se tornó en fatídico por una mala pasada. No en vano, la fortuna no ha perseguido a Porta, cuyo abogado, Marco Tulio Amaya, fue asesinado por unos sicarios. Tampoco la situación económica le ha acompañado. Su discapacidad psíquica le impide trabajar y durante estos meses ha sobrevivido con la pensión que su madre le enviaba desde Chipiona, en un país donde la conflictividad social y la inseguridad son una constante diaria.
Pero no todo ha sido negativo en la experiencia que Toni, como lo llaman en casa, ha vivido en el país latino. Su historia de amor con María Antolina culminó en boda y ambos serán padres dentro de un mes. En este sentido, la futura abuela manifestó su preocupación. «Es posible que a ella no la dejen volar, por el embarazo. Pero esperamos que se solucione lo antes posible y que pronto podamos tenerlos en casa».
Josefa, que ha luchado porque su hijo no cayera en el olvido como una auténtica madre coraje, recordó con pesar su precaria situación económica. «Yo tengo una pensión de viudedad y él no tiene suficiente dinero para pagar los billetes de avión, no sabemos cómo lo vamos a hacer». Porta ha pedido ayuda varias veces al Gobierno para que le faciliten el regreso a España.